El líder del Dakar-2018, el español Carlos Sainz (Peugeot), recibió hoy una penalización de diez minutos por su «comportamiento potencialmente peligroso» durante la cuarta etapa, según indicó el lunes el organismo de los comisarios del evento.

El cuerpo disciplinario del rally se reunió después de la queja del holandés Kees Koolen (Maxxis Super B Dakarteam), quien acusó a Sainz de haberlo golpeado y no haber detenido.

Koolen, de 52 años, es uno de los fundadores de Booking.com, el mayor buscador online de reservas de habitación del mundo, con más de un millón y medio de establecimientos en 226 países, y compite a bordo de un cuatriciclo.

El piloto y empresario acusó ante la organización a los líderes de la clasificación general en autos y a Yazeed Al- Rajhi, de la marca Mini, por sufrir un atropello durante la séptima etapa por parte de uno de ellos y por no prestarle auxilio de parte de los otros dos.

El holandés asegura que Sainz lo atropelló en la primera parte de la maratón camino a Uyuni y no se detuvo para ayudarlo.

El reglamento del Dakar remarca que todo piloto que encuentra a otro competidor accidentado tiene que socorrerlo y en caso de que sea de gravedad tendrá que pulsar el iritrack (el sistema de seguridad y comunicación de la organización).

El incidente ocurrió «aproximadamente» en el km 184 del cuarto especial alrededor de San Juan de Marcona, Perú, según el fallo.

Esta penalización disminuye la ventaja de Sainz en la clasificación general. Sin embargo, el «Matador» todavía tiene 56 minutos y 37 segundos de ventaja sobre su inmediato perseguidor, Nasser Al-Attiyah (Toyota) de Qatar.

Bruno Famin, el jefe del equipo francés, dijo que iba a apelar.