La Justicia de Irán condenó este lunes al futbolista Amir Nasr Azadani a 26 años de prisión por involucrarse en las protestas antigubernamentales de noviembre pasado por la muerte de la joven Mahsa Amini que estaba bajo custodia por violar el código de vestimenta islámico.

Azadani, que se enfrentaba a una posible ejecución en la horca, fue una de las dos personas condenas por las acciones registradas el 16 de noviembre cuando tres miembros de las fuerzas de seguridad murieron durante un incidente registrado en la provincia de Isfahán.

El deportista fue imputado por «incurrir en delitos contra el orden público, reunirse y conspirar para vulnerar la seguridad del país», además de cometer ‘moharebé’, «un delito contra Dios», según informaciones de la cadena ‘Iran International» reproducidas por la agencia de noticias DPA.

El futbolista iraní, de 26 años, había sido acusado y enfrentaba una posible sentencia de muerte en la horca por reclamar en favor de los derechos de las mujeres en su país.

En su momento el sindicato internacional de jugadores, FIFPRO, pidió «la eliminación inmediata de su castigo» al igual que se manifestaron en ese sentido distintos organismos ligados a los derechos humanos.