Tras una semana repleta de incertidumbre y con ausencia total de certezas por parte de la cúpula del fútbol argentino con respecto a la reanudación de la primera división, el ascenso golpeó la mesa y decidió jugar este fin de semana. Entre los dardos que se tiran Marchi y la AFA, las categorías menores tendrán acción y, por supuesto, también la tendrán los equipos rosarinos.
Mientras los planteles de Godoy Cruz, que se alojó en Rosario, y de Belgrano, que hizo lo propio en Buenos Aires, se desayunaron con la noticia de que la AFA suspendió los dos cotejos programados para el viernes, dirigentes del ascenso aseguran que desde la casa madre del fútbol argentino “dieron el visto bueno” para comenzar.
En diálogo con Conclusión, Daniel Mariatti, presidente de Argentino, aseguró que “nuestro plantel va a jugar el partido como corresponde. Nosotros estamos al día”. El Salaíto recibe en Rosario a Muñíz, desde las 17, por la fecha 16 de la Primera D.
“Desde la AFA nos dicen que debemos jugar y nosotros lo vamos a hacer. La relación con Agremiados la tienen los futbolistas. Si hay algún problema, ellos lo comunicarán. Pero desde nuestra parte, la fecha se juega”, continuó.
No es el caso del Salaíto, pero los más afectados, sin dudas, son los clubes del ascenso. Sin embargo, Dante Majori, presidente de Yupanqui y una de las principales voces de la Primera D, confirmó que la divisional tendrá acción más allá de las deudas que puedan existir.
En tanto, Luis Stern, vicepresidente de Central Córdoba, le aseguró a este medio que tras una reunión en la cual el dirigente charrúa estuvo presente, se decidió que la Primera C como la Primera B Metropolitana “jugarán el fin de semana”.
“Nosotros visitamos este lunes a Cañuelas (17 horas) y vamos a presentarnos con nuestro plantel profesional, como corresponde”, sostuvo.
Asimismo, aseveró que “si hay algún equipo que por una cuestión interna o de sus profesionales, no presenta el primer equipo y presenta juveniles, o lo que fuere, ya corre por cuenta de cada club. Nosotros tenemos todo listo para jugar el lunes con nuestro plantel profesional”.
Los jugadores, en el medio del tornado
Que sí, que no. Que con titulares, que con juveniles. Lo cierto es que los planteles quedaron en el medio de una situación desgastante y ellos mismos, que son los principales damnificados por la deuda salarial, desconocen qué pasará.
Guido Gardeano, volante de Central Córdoba, le explicó a Conclusión que: “Nos adeudan diciembre, enero y febrero. Desgraciadamente no tenemos sueldos millonarios. Muchos de nosotros vivimos al día con lo que ganamos, así que estamos esperando que todo esto se resuelva cuanto antes«.
“Creo que hay que ponerse en el lugar del otro, como sí veo que hacen jugadores de primera. Nadie nos garantiza que si nosotros jugamos, alguna vez paguen lo que nos deben”, concluyó.
