Central Córdoba arrancó con el pie derecho, el elenco de Rossi venció a Liniers por 2 a 0, y tuvo un debut ideal en el inicio del torneo Apertura de la Primera C, en Buenos Aires. El único tanto del juego lo anotó Juan Manuel Cobelli, el Charrúa fue sólido y efectivo.

En partido intenso, el Charrúa tuvo un buen pasaje en el inicio del partido, intentando atacar sobre el arco rival.

Pero en el complemento, el Matador de Tablada pegó primero y con gol del artillero Juan Manuel Cobelli que capturó un rebote en el travesaño tras un remate de Ferrero y así abrió el marcador.

A los 23 minutos de la etapa final, el juvenil Antonio Caial (que había ingresado un rato antes), tuvo un fortísimo choque con un defensor del local, que levantó la pierna, impactó en el futbolista y cayó pesadamente, el servicio médico reaccionó rápidamente y la ambulancia lo trasladó a un sanatorio para que sea atendido, pero la lesión no fue de gravedad.

Después del accidentado episodio, el cotejo se suspendió hasta que retornara la ambulancia y se reanudó 21 minutos después.

Liniers tuvo la pelota pero no pudo vulnerar el notable bloque defensivo que no permitió que la Topadora complicara al arquero Giroldi, que también transmitió seguridad.

Y sobre el final, después un tiro de esquina, apareció Nicolás González metiendo un gran cabezazo y tuvo su bautismo de gol con el Azul de Tablada.

El elenco de Rossi formó con: Matías Giroldi; Gianfranco Alegre, Paulo Killer, Ignacio Boggino, Maxi Saucedo; Maximiliano Gómez, Bautista Carrera, Agustín Musso, Estanislao Ferrero; Nicolás González y Juan Manuel Cobelli.

Foto: La Capital.