Por Pablo Bloise

El clásico rosarino ya tiene a su protagonista número 23. Se trata nada menos que de Federico Beligoy, el árbitro de 47 años que dirigirá su segundo derby entre Newell’s y Central, otra vez en el Coloso Marcelo Bielsa.

En aquel clásico de 2007, a Beligoy le tocó arbitrar una victoria canalla. El Central de Carlos Ischia venció a la Lepra de Pablo Marini por 1 a 0 en una tarde lluviosa en el Parque Independencia y el juez fue uno de los grandes protagonistas, ya que sancionó el penal con el que el colombiano Martín Arzuaga decretaría el gol del triunfo para el elenco auriazul.

En la previa a un nuevo duelo entre leprosos y canallas, y en diálogo con Conclusión, el árbitro porteño resaltó que la designación le genera “alegría y satisfacción. He vivido muchos clásicos y estoy muy agradecido de poder participar en partidos de este tipo. Que la designación haya sido directa me da mucha confianza. Esperemos que todo salga bien el domingo”.

Al ser consultado qué significa arbitrar un clásico entre Newell’s y Central, el referí no dudó en destacar que “se vive con muchísima pasión y pertenencia. En este clásico veo mucho barrio y mucho pueblo. Son dos equipos que marcan a toda una ciudad y eso se transmite”.

Ya me tocó dirigir y sé cómo se vive y cómo se siente. Por ejemplo, Boca y River generan otras cuestiones un poco más grandilocuentes. En el clásico rosarino se juega con todo el empeño y con mucha garra porque si no el día a día es complicado. Será un desafío muy lindo”, continuó.

En referencia a la preparación, aseguró que “sabemos lo que significan estos partidos. Tanto para el adentro como para el afuera. Pero nosotros debemos prepararnos de la misma manera que lo hacemos siempre. Tenemos que estar preparados”.

El domingo, Beligoy estará acompañado por los asistentes Ezequiel Brailovsky y Javier Uziga.

Habló de uno de los jugadores más temperamentales de Central

La referencia es para Teo Gutiérrez, delantero canalla, sobre quien Beligoy deslizó: «Lo dirigí en Racing, River, Central y en Barranquilla. Nunca tuve ningún problema con él. Sé que tiene su carácter y una personalidad muy fuerte. Tiene pocas pulgas. Si se tiene que agarrar a trompadas lo va a hacer. Pero con nosotros (los árbitros) siempre es muy respetuoso. Está todo bárbaro y ojalá se dedique a jugar porque lo hace muy bien”.

Federico Beligoy será el árbitro del clásico rosarino