Por Pablo Martínez

Newell’s estuvo impreciso, en el complemento entró dormido, lo pagó caro y no le alcanzó con la reacción del final. El elenco de Sanguinetti tuvo la entrega de siempre pero equivocó los caminos para encontrar el gol y sufrió una derrota que no esperaba.

La Lepra asumió el rol protagónico en el arranque pero con el correr de los minutos, Unión le arrebató el dominio y no sufrió demasiado. Como en tantos otros partidos, el Rojinegro quedó parado para anotar de contra, pero sus hombres de gestación se equivocaban en el pase final.

En el complemento, los rosarinos entraron dormidos y en ese tramo del juego llegó el penal de Fernández sobre Luna Diale, que el juez Rapallini cobró con la ayuda del VAR. En un partido de gol gana, fue demasiado para el elenco del parque, era todo cuesta arriba.

Newell’s no encontró su juego, no tuvo profundidad, le faltó encontrar a sus hombres por los costados y si bien tuvo una reacción futbolística que casi termina con el gol de Nazareno Funez, su remate dio en el palo, no le alcanzó al menos para rescatar un punto.

En el juego, la Lepra no tuvo demasiadas variantes con respecto a partidos anteriores, esta vez le faltó la efectividad de que venía teniendo y no pudo encontrar su juego en la contra. Sanguinetti deberá mejorar en la generación de llegadas al área rival para volver a la victoria.

El balance del Rojinegro en la Copa de la Liga sigue siendo positivo, pero para pelear por un lugar en la zona de clasificación tendrá que mejorar para no perder terreno entre los primeros cuatro de su zona.