Pablo Lavallén se convirtió esta tarde en el nuevo entrenador de Atlético Tucumán, en reemplazo de Juan Manuel Azconzábal, tres días después de haber renunciado a su cargo en San Martín de San Juan.

La negociación había quedado «muy avanzada» el miércoles tras charlas telefónicas y se terminó de cerrar este jueves en una reunión entre las partes, que acordaron un contrato hasta junio del año que viene.

Lavallén asumirá el próximo lunes, luego de que el «Decano» visite a Godoy Cruz en Mendoza el próximo sábado a las 20:00, por la duodécima fecha del torneo de Primera División 2016/17.

Para el DT, se trata del segundo equipo de Primera División tras haber estado en la institución cuyana y en las inferiores de River.

Azconzábal había renunciado después de la derrota ante Lanús, en la décima fecha, y en la jornada anterior el equipo fue dirigido de manera interina por Luciano Precone.

Para visitar a Godoy Cruz este sábado, también se sentará en el banco Precone y Lavallén haría su debut frente a Quilmes en condición de local.

En primera instancia, los dirigentes de Atlético pusieron los ojos en Leonardo Madelón, pero éste arregló con Belgrano de Córdoba.

Luego, hubo charlas con Eduardo Domínguez, quien no se mostró muy interesado en el desafío, y con Facundo Sava.

El «Colorado» había llegado a un acuerdo de palabra con la institución, aunque terminó desechando la propuesta porque un problema de índole personal le impedía radicarse en Tucumán.

Así las cosas, se mantuvieron reuniones con Néstor Gorosito, Javier «Archu» Sanguinetti y Roberto Sensini para conocer sus proyectos, pero ninguno terminó de colmar las expectativas.

Con la salida de Lavallén de San Martín, los cañones quedaron apuntados hacia él, pese a que el vicepresidente cuyano Jorge Miadosqui había dicho que el DT había renunciado por cuestiones deportivas y no porque tenía otra oferta, algo que evidentemente ocurrió.