Newell’s consiguió un resultado positivo en Victoria, tuvo tenencia, por momentos se impuso al rival pero le faltó poder de fuego en los metros finales, en un partido intenso, que tuvo un inicio con alternativas cambiantes. El elenco de Heinze exhibió decisión y protagonismo, para cambiar su devaluada imagen en el torneo local.
Lo ganaba desde el arranque, se lo dieron vuelta y pudo rescatar un punto. Newell’s pasó por todos los estados anímicos, en un comienzo ideal con el 1-0 de Brian Aguirre, y del casi segundo de Gómez, llegó el penal que cometió Ditta y anotó Colidio.
Pero en esos primeros 15 minutos, el partido era abierto, la zona de volantes fue de libre tránsito y Tigre lo dio vuelta con el tanto de Luciatti, en un tiro de esquina.
Lo más interesante de la noche, fue la postura del conjunto del parque, siempre intentó atacar con sus extremos activos, tanto Aguirre como Sordo, exigieron por sus sectores pero no encontraban final de jugada.
En el complemento, Newell’s tuvo dominio casi absoluto del balón y territorio. El Matador esperó muy atrás y el Rojinegro se le tiró encima, se veía venir la igualdad.
El pase fantástico de Sforza para que la vaya a buscar Ferreira, que cabeceó con calidad por arriba del arquero, pusieron justicia en el marcador con el 2 a 2, porque el dueño de casa había hecho muy poco para quedarse con los tres puntos y Newell’s que hizo el gasto, algo debía llevarse a Rosario.
Dos tiros en los palos, un par de remates peligrosos, hicieron que Newell’s mereciera al menos no perder y la igualdad en el final puso un poco de justicia en Victoria.
Los más destacados en la Lepra: el juvenil Brian Aguirre, que con gol incluido, se tornó incontenible (principalmente en el primer tiempo), como siempre la solvencia de Ditta en el fondo y el incansablemente ida y vuelta de Iván Gómez.
