El ex campeón del mundo, Sergio «Maravilla» Martínez, superó los exámenes médicos y la Federación Argentina de Boxeo (FAB) rehabilitó su licencia como boxeador, en un paso más dentro de las especulaciones sobre su regreso a la actividad profesional.

De esta forma, a los 43 años y según la FAB, está apto para volver a boxear, pese a que su agente Sampson Lewkowicz había desmentido la información de su regreso, la cual, unos días después, cambió por un impasse de espera para su decisión.

«Sergio pidió la licencia porque va a hacer una película. Y como va a combatir sin cabezal, está entrenando cada vez más fuerte. Mentalmente y de la rodilla está perfecto. El fin de esta historia es que saca la licencia y luego va a tomar una decisión», dijo el uruguayo.

Lewkowicz, incluso, negó que el posible regreso se deba a las necesidades económicas del propio Maravilla. «Hasta mi propio hijo me preguntó si Sergio andaba mal de dinero. De ninguna manera, sólo que los guerreros no se entregan», dijo en radio La Red.

«Él no estaba bien con (Miguel) Coto, hasta podría haber muerto esa noche, pero no se entregó. El monstruo que tiene cada boxeador adentro les dice que no pueden irse con la última pelea perdida», indicó su agente uruguayo.