Newell’s está cumpliendo una estupenda perfomance en el torneo de la Primera D del futsal de AFA, con un gran rendimiento colectivo, y uno de sus máximos exponentes, es Martín Solzi, que dialogó con Conclusión sobre el presente Rojinegro.

Solzi comenzó el diálogo, explicando el buen presente de la Lepra a nivel nacional: «Hemos tenido hasta acá, una buena perfomance, pero aún no hemos ganado nada, por el formato del torneo, se puede hacer un muy buen año pero todo se va a definir en la última fecha».

«El domingo tenemos un partido complicado (Monte Viejo) , ante un rival que se juega todo porque no tiene margen de error, después vendrán otros partidos difíciles, lo estamos viviendo con la mayor tranquilidad posible, aunque no es fácil. Pero estamos bien como grupo, el rendimiento ha sido progresivo durante el año, y esperamos mantenerlo para lograr el objetivo», sentenció el jugador Rojinegro.

De cara al tramo final del torneo, el lateral que convirtió 19 goles en 19 partidos jugados, se refirió a los puntos a tener en cuenta para cumplir con el gran objetivo: «Tenemos que seguir jugando parecido como lo venimos haciendo, tenemos que ser bien intensos, tratar de superar las adversidades que tengamos en frente, tanto las aleatorias como las del juego de los rivales. Otra de las claves, es la concentración, porque nos puede costar muy caro. Tenemos que ser ordenados tácticamente y ser inteligentes cuando atacamos, siendo finos con la pelota».

«Lo más complicado de manejar es el tema de la ansiedad, porque a medida que van pasando las fechas, uno ve más cerca el tramo final, que es donde se define todo, por ende no es fácil. Pero tenemos que estar tranquilos, si bien uno se pone ansioso, pero cuando empieza a rodar la pelota todo cambia, y tenemos que tener en cuenta, que hay una ventaja que debemos mantener», señaló el futbolista Leproso.

En lo personal, Martín Solzi, que fue campeón con Usar en la temporada anterior, habló de su llegada al club del parque y sus sensaciones: «La experiencia que estoy viviendo es hermosa, fue complicado al principio porque tenía que adaptarme al grupo, que se portó diez puntos conmigo, dentro y fuera de la cancha. En cuanto al cambio que se puede distinguir entre AFA y Rosarina, es que todo es más físico y técnico, son todos los partidos cerrados, cuesta mucho abrirlos, la diferencia es que todo muy parejo, mientras que en Rosarina, hay tres o cuatro equipos que siempre pelean arriba».