El ídolo leproso Maxi Rodríguez, que se presentó de vuelta en el Parque Independencia con un golazo para el 1-1 ante Boca, reconoció irse con «sensaciones agridulces porque queríamos los tres puntos, sobre todo por el rival que teníamos en frente».

«Volver después de un año y medio, salir a la cancha y hacer un gol es una sensación única. Sabíamos que iba a ser un partido complicado, porque Boca tiene mucha calidad y lo demostró: no necesita jugar bien para crear situaciones», analizó la Fiera.

Y agregó: «Creo que en el primer tiempo nos costó pero pudimos acomodarnos. En el segundo manejamos bien la pelota pero o nos poníamos 2-0 o pasaba lo que terminó pasando. Nos vamos con un poquito de bronca por el final, pero el equipo estuvo muy bien».

«Hoy estuvimos muy bien todos, fue un partido correcto. Hay cosas para mejorar, tenemos que seguir porque éste es el camino. Estamos bien y hay que acostumbrarse a ganar», dijo luego en un tono más positivo, pensando en los partidos que se vienen y la cercanía del clásico rosarino.

Enseguida, Maxi Rodríguez se refirió a la situación del gol al decir que «cuando el Gato (Mauro Formica) me da la pelota, al principio pensaba recortar pero el defensor se frenó, entonces vi el segundo palo libre y le pegué fuerte. Por suerte terminó entrando arriba».

«Me voy con sensaciones agridulces, en lo personal muy contento y feliz por estar de nuevo en mi casa, pero quería irme con los tres puntos sobre todo por el rival que teníamos en frente», concluyó el delantero rojinegro, elegido la figura del partido contra Boca.