Nahuel Guzmán, ex arquero de Newell’s campeón con el elenco del Tata Martino en 2013, fue héroe y figura en la consagración de Tigres en el torneo mexicano. Y sin dudas que está bajando el telón de uno de sus mejores años como profesional.
Tigres venció 4-2 en la definición desde el punto del penal a Pumas de la Universidad Autónoma de México (UNAM), tras caer en la revancha de la final 4-1 (4-4 en el global) y se consagró campeón del torneo Apertura 2015 del fútbol mexicano.
Y en esta serie de penales, Nahuel “El Patón” Guzmán, fue clave. Ya que el rosarino atajó un penal y protagonizó un «polémico» acto: besó a su compañero Jiménez, quien convirtiera el último penal para darle el triunfo y una estrella más a su equipo.
El cotejo se disputó en el estadio Olímpico de Coyoacán, Ciudad de México, y los tantos de Pumas fueron marcados por el mexicano Eduardo Herrera, el paraguayo Silvio Torales, y los uruguayos Matías Britos y Gerardo Alcoba (ex Colón de Santa Fe).
Para el conjunto de Monterrey descontó el francés André Pierre Gignac en tiempo suplementario. En Pumas estuvieron los argentinos Daniel ‘Hachita’ Ludueña (ex River Plate) e Ismael ‘Chuco’ Sosa (ex Independiente).
Pero la alegría mayor se la llevó Nahuel Guzmán, ex jugador leproso y actual arquero de la selección argentina, que cerró un año espectacular. Fue citado por Gerardo Martino para integrar la nómina albiceleste, y se consolidó en el arco de Tigres, teniendo una temporada formidable y convirtiéndose —en poco tiempo— en ídolo del equipo felino. Hoy, su nombre da vueltas alrededor de todo México.
