Por Santiago A. Fraga

Ante un estadio repleto, Newell’s Old Boys se repuso de las duras derrotas recientes y jugó uno de los mejores partidos del ciclo de Gabriel Heinze, siendo claramente superior a Barracas Central y venciéndolo por 1 a 0 en el Coloso Marcelo Bielsa.

Desde el comienzo, y tal como había acusado recibo Heinze en la conferencia de prensa previa al partido, se notó a un Newell’s que tomó nota de los errores de partidos anteriores y encaró una postura ligeramente más vertical, sin negociar su juego de posesiones extensas construidas desde la zona defensiva.

Con el aval de un Barracas que se mostró muy pasivo en ataque, sin poner más de cuatro hombres en ofensiva aún perdiendo, la ‘Lepra’ monopolizó la tenencia de la pelota y jugó gran parte del encuentro en campo rival.

Si bien en varias jugadas estuvo al borde de cometer un error grave (muchos pases al medio fallidos en defensa que no fueron aprovechados por los atacantes rivales), el rojinegro sorteó esos momentos y en líneas generales exhibió un sistema defensivo mejor trabajado, con los centrales ocupando los espacios dejados por los laterales proyectados (algo que Instituto le hizo padecer mucho en el último encuentro).

Al mismo tiempo, así como en el primer tiempo le costó transformar esa tenencia en ocasiones claras, en el segundo tiempo sí fue más agresivo contra el arco de Andrés Desabato, principalmente gracias al trabajo combinado entre las recuperaciones de Juan Sforza e Iván Gómez junto con el juego de Cristian Ferreira y Brian Aguirre.

Aún así, y como en gran parte de los goles del rojinegro de Heinze, la llave del gol en la noche rosarina fue nuevamente una jugada de pelota parada, con un córner que aprovechó Facundo Mansilla para definir con un buen cabezazo esquinado.

La misma importancia en esa etapa inicial la tuvo Lucas Hoyos, desviando con grandes reflejos un cabezazo de Brian Sepúlveda a un metro del arco.

La cantidad de ocasiones creadas por Newell’s en este partido opacaron un poco los problemas de definición que aún tiene el equipo, otorgando además la tranquilidad de notarse una reacción de parte de los jugadores después de una serie de golpes duros sufridos por el equipo.

Como aliciente general, la ‘Lepra’ hoy también se enfrentó a un pésimo arbitraje de Luis Lobo Medina, con una marcada tendencia a favorecer a Barracas, ya sea desde las divididas (el contador de foules terminó 17-7 en contra del rojinegro) hasta con acciones más alevosas, como una mano en la que ni siquiera se concedió la revisión del VAR.

Ante un rival de características complicadas, Newell’s consiguió un triunfazo que no solamente le sirve para quedar momentáneamente a dos puntos del líder, sino también para otorgar tranquilidad al trabajo que aún falta por hacer y a las dudas que acechaban sobre el equipo después de las derrotas recientes.