Sobre la arena de La Florida y a orillas del Paraná. En su ciudad, Nicolás Capogrosso representa al país en un deporte que causa sensación alrededor del mundo: beach vóley. El rosarino actuó el pasado viernes en el primer día de acción de la tercera etapa del Circuito Sudamericano, y junto al entrerriano Julián Azaad, cosechó un triunfo y una derrota.

En diálogo con Conclusión, y consultado sobre la experiencia de jugar en Rosario, Capogrosso expresó: “Me da mucha felicidad por la gente que hace mucho esfuerzo para que esto sea una realidad. En lo personal, fue una sensación rara al principio, pero con el correr de los puntos me fui acomodando”.

Jugar en la cancha en la que entreno y con mi gente es algo muy lindo. Realmente estoy orgulloso de que el Sudamericano se juegue acá”, continuó.

Sobre los partidos que disputó la dupla argentina el viernes (derrota 2-1 ante Venezuela y victoria 2-0 ante Paraguay), el rosarino aseveró que “el primer partido se nos escapó por errores nuestros. Fue una lástima porque lo tuvimos para ganar. Por momentos no hicimos las cosas bien y lo terminamos pagando”.

En el segundo, ante Paraguay, jugamos mejor. Fue una lástima porque de haber ganado el primero también ya hubiéramos tenido un pie en la semifinal, pero no se dio. De todas formas, muy contento por el triunfo y junto con Julián vamos a ir por más”, añadió.

En cuanto al duelo de este sábado ante Uruguay, Capogrosso indicó que: “Necesitamos un triunfo para evitar un cruce difícil en la próxima ronda. Si no tenemos un buen resultado, nos puede tocar Brasil o Chile, que son dos equipos muy fuertes que uno siempre espera encontrarlos más adelante. Ojalá tengamos un buen partido”.

Por último, recalcó: “Les agradezco mucho a todos: a la Federación, a la Asociación Rosarina de Vóley y al Beach Vóley Rosarino. Me da mucha felicidad poder jugar acá y vamos a intentar llevar a la Argentina y a Rosario a lo más alto posible”.