A las 15 estallará la ciudad. El partido esperado por todos los rosarinos ya se vive en las calles, en cada casa, en cada rincón. Los hinchas se preparan para vivir el “partido del año” y la ciudad se viste con los colores del desafío. Auriazules y rojinegros se enfrentarán para quedarse con el tan deseado encuentro.
Los fanáticos de Newell´s se reúnen en las casas, se concentran en los bares y esperan ansiosos el inicio del encuentro aferrados a los televisores. Los hinchas canallas copan Arroyito y desbordan “El Gigante”, que ya siente la pasión de los entusiastas.
Por su parte, la policía también se alista para recibir el superclásico. Son 1000 los efectivos involucrados: 300 se repartirán en los alrededores del estadio y los 700 restantes se harán presentes en el campo de juego que abrirá sus puertas a partir de las 12.30.
Las estadísticas marcan que en los últimos enfrentamientos el canalla se quedó con la victoria, dejando al leproso sin ganar el encuentro durante 2 años consecutivos. Sin embargo, en los clásicos es el orgullo y el honor de cada equipo lo que se pone en juego, la pasión de cada hincha depositada en los 11 titulares, con lo cual nada está dicho.
Solo resta poner en ruedo la pelota y esperar el pitido inicial para dar marcha a unos de los espectáculos más vibrantes de la ciudad.
