Después de varias idas y venidas, postergaciones, declaraciones cruzadas y demás, River y Boca se enfrentarán mañana para definir al campeón de la Copa Libertadores de América en un partido que se jugará en un lugar atípico para el certamen continental ya que será en la ciudad de Madrid, en España.

El encuentro se disputará a partir de las 16.30 en el estadio Santiago Bernabéu, será controlado por el árbitro designado por Conmebol Andrés Cunha (Uruguay) y la terna es completada por los jueces de línea Nicolás Taran y Mauricio Espinosa mientras que el cuarto juez será Víctor Carrillo (Perú).

En tanto, el VAR estará a cargo de Leodán González (Uruguay), el asistente 1 será Esteban Ostojich (Uruguay), el 2 Richard Trinidad (Uruguay), el Observador VAR, Martín Vázquez (Uruguay) y el asesor internacional: Carlos Torres (Paraguay).

Tras el partido de ida jugado en la Bombonera donde ambos elenco igualaron 2 a 2, en caso de persistir el empate -esta vez no hay gol de visitante-, habrá alargue, donde los técnicos podrán hacer un cuarto cambio, y eventualmente a definición por penales, en la que también se aplicará el VAR.

El cruce protagonizado por los dos equipos argentinos más importantes será el último de la vieja modalidad, ya que a partir de la próxima edición de la Copa habrá una sola final, al estilo europeo, que se jugará en Santiago de Chile.

El partido debió haberse jugado el sábado 24 de noviembre pasado, pero en una jornada bochornosa, la violencia le volvió a ganar al fútbol y una agresión de simpatizantes de River al micro que trasladaba al plantel de Boca que provocó lesiones a Pablo Pérez obligaron a los clubes a alcanzar un «pacto de caballeros» con la Conmebol para postergarlo.

Luego de reuniones varias, el 27 de noviembre la Conmebol confirmó que la final se jugaría en el exterior y luego de nombrarse varias sedes, el 29 del mismo mes se supo que el encuentro iba a disputarse en Madrid.

De esta manera, el encuentro se jugará a 10.000 kilómetros de Buenos Aires y bajo fuertes medidas de seguridad ya que habrá más de 4.000 policías y agentes de seguridad privada, un despliegue superior al de la final de la Liga de Campeones del 2010 en el Santiago Bernabéu.

A la hora de hablar de los futbolístico, en River parecen estar las cosas más claras ya que el entrenador Marcelo Gallardo pondría un equipo con más presencia en el mediocampo aunque no se descarta que coloque una defensa con cinco juhadores.

Gallardo probó dos elencos, en uno puso a Lucas Martínez Quarta y en otro a Ignacio Fernández. Con Martínez Quarta sumaría gente atrás y liberaría a los laterales, una de las estrategias de la final de ida.

En tanto, con Fernández River tendría diversos movimientos en el mediocampo, incluyendo llegada al área rival y cierta cuota de gol mientras que aún el técnico no dio a conocer si Ignacio Scocco estará entre los 18.

Por su parte, el entrenador Guillermo Barros Schelotto juega al misterio y no reveló si pondrá un equipo con el doble 9 compuesto por Ramón Ábila y Darío Benedetto o si colocará a Agustín Almendra en el mediocampo.

En caso de que opte por la primera opción el que jugaría más retrasado sería Cristian Pavón, pero si decide colocar a Almendra el propio Pavón será el que haga dupla de ataque con Ábila.

Probables formaciones:

River: Franco Armani; Gonzalo Montiel, Jonatan Maidana, Javier Pinola, Milton Casco; Enzo Pérez, Leonardo Ponzio; Ignacio Fernández o Lucas Martínez Quarta, Exequiel Palacios, Gonzalo Martínez y Pratto. DT: Marcelo Gallardo.

Boca: Esteban Andrada; Julio Buffarini, Carlos Izquierdoz, Lisandro Magallán, Lucas Olaza; Nahitan Nandez, Wilmar Barrios, Pablo Pérez, Cristian Pavón; Ramón Ábila y Darío Benedetto o Agustín Almendra. DT: Guillermo Barros Schelotto.

Árbitro: Andrés Cunha (Uruguay).