Por Diego Mussetta
Otra vez el mal clima como protagonista. Pero otra la pasión de los rosarinos en su máxima expresión apoyando al automovilismo. Bajo un cielo gris y una llovizna que frenó minutos antes del mediodía, se corrió la final del Súper TC 2000 en el autódromo Juan Manuel Fangio, donde miles de espectadores disfrutaron del sonido de los poderosos V8.
Como en 2013, pero esta vez en condiciones climáticas adversas, Matías Rossi se quedó con la victoria y con su segundo «Monumento». En la previa dijo que «Rosario es uno de los circuitos que más me gusta». Y este domingo lo demostró. Manejó a la perfección, contó con un Toyota demoledor desde la mañana cuando ganó la segunda serie y mostró templanza cuando Agustín Canapino lo presionó con el Chevrolet Cruze, ya que por momentos fueron ‘soldados’.
Digno del aplauso fue el tercer puesto de Matías Milla también con un Corolla, mientras que cuarto se ubicó Leonel Pernía, poleman del sábado y vencedor de la primera serie de hoy, aunque no pudo en la largada con Rossi y luego perdió el último escalón del podio con Milla. La quinta ubicación quedó en manos de Mariano Werner, siendo el mejor Peugeot 408; y sexto el ganador en Trelew Emiliano Spataro, quien tuvo un sábado para el olvido con la rotura del motor de su Renault Fluence pero con un domingo más que positivo, que le permite seguir en la cima del campeonato.
Mientras, para los pilotos de la región la actuación fue dispar. Mientras Facundo Ardusso intentó avanzar (se ubicó 7º con el Renault Fluence), Fabián Yannantuoni abandonó con el Peugeot 408 cerrando un fin de semana para el olvido.
Ayer la jornada fue emocionante, desde la mañana con los entrenamientos y hasta la tarde con una prueba de clasificación cambiante hasta el banderazo final.
Fue Leonel Pernía, con Renault Fluence, el que marcó la pole y el que tuvo el privilegio de largar primero en la serie inicial. Y el Tanito no dejó dudas. Pese a la intensa, por momentos lluvia, y a la pista mojada, el tandilense marcó el rumbo y ganó de punta a punta. Fue seguido por Agustín Canapino (Chevrolet Cruze) y por el parejense Facundo Ardusso (Renault Fluence), quien ganó tres puestos y terminó en un muy buen puesto. Mientras que sensacional fue la actuación bajo el agua de Emiliano Spataro (Renault Fluence). El ganador en Trelew no pudo clasificar ayer por la rotura del motor y en esta primera serie largó desde el último lugar (14) y llegó sexto.
La segunda batería mostró la contundencia de Matías Rossi, quien con el Toyota Corolla voló y se quedó con el mejor tiempo. Detrás quedaron su compañero de equipo Matías Milla y Damián Fineschi (Peugeot 408).
La intendenta y el alargue del autódromo
Por su parte, antes de la final dialogó con Conclusión la propia intendenta municipal Mónica Fein, quien dijo «que se está trabajando con un proyecto para avanzar en el alargue del autódromo, una obra muy pedida por los fanáticos y que nos permitiría traer a categorías como el Turismo Carretera».
Mientras, dejó una promesa: «Me gustaría que antes de terminar mi mandato el TC corra en Rosario».
Según fuentes consultadas por Conclusión, la idea es agrandar el circuito en mucho más de los 1.100 metros pactados. Se habla hasta del doble, con un ancho de pista más grande. Sólo falta la decisión política. Pero el sueño de que el TC y el TN lleguen a Rosario es posible.
