Newell’s y Central cayeron derrotados por dos goles, ante Banfield y Unión respectivamente, y cerraron de esta manera un fin de semana negro para los rosarinos de la ciudad. La Lepra no pudo mantener la racha positiva y fue vencida en el Coloso, mientras que el Canalla no da pie con bola en el campeonato y sumó una nueva derrota afuera de casa.

Sin dudas que al que peor le cae es a Central, que ganó apenas dos partidos de los últimos veinte en el torneo local, sufrió las lesiones de tres jugadores y llega con flojo andar a la final de Copa Argentina ante River. Pero Newell’s también dejó pasar una gran chance de quedar puntero, terminando relegado al cuarto puesto tras Estudiantes, Boca y San Lorenzo.

Los de Coudet tienen la cabeza puesta en la Copa Argentina desde hace tiempo, demostrando que la doble competencia no es algo para ellos. Ya lo dijo Coudet ayer en conferencia de prensa. En tanto que los de Osella no deben aflojar en la puntada final, ya que se les viene una seguidilla de partidos fáciles para aprovechar y terminar el año lo más arriba.

Newell’s quiere seguir peleando el torneo y Central coronar la Copa. Aunque ambos están por buen camino, pero este fin de semana que pasó deberá ser borrado rápidamente de la memoria de los protagonistas. Que no se nuble el objetivo, la premisa fundamental.

Central y Newell’s pueden terminar un año con más de una alegría para el público rosarino. De eso, dependerá únicamente el camino que sigan jugadores y cuerpo técnico. Que los últimos tropiezos sirvan como lección.