Una verdadera batalla campal se registró durante un recital del grupo de cumbia villera Damas Gratis en el teatro Caupolicán de Chile, donde la gente lanzó botellas, bengalas y hasta bombas molotov, con un saldo de once carabineros heridos.

El show se venía dando con total normalidad hasta que en determinado momento tuvo que ser suspendido debido a que parte del público comenzó a invadir el escenario para saludar al cantante Pablo Lescano.

Por cuestiones de seguridad se decidió suspender el espectáculo, lo que enardeció al público, que comenzó a lanzar botellas, bengalas y hasta bombas molotov.

Debido a la furia de los fans y el descontrol reinante, los carabineros desalojaron el local, pero los incidentes se trasladaron a la calle con enfrentamientos entre el público y los uniformados que dejaron un saldo de once efectivos heridos.

En el medio de la agresión, los carabineros sufrieron el robo de cascos y hasta de una pistola. Un efectivo fue retirado en grave estado, tras sufrir la fractura de su mandíbula.

El líder del grupo subió a las redes un comunicado a raíz de los hechos: «Anoche tocamos en el teatro Caupolican de Santiago y quiero contar lo que yo viví desde el escenario. El show estuvo buenísimo, la gente como siempre eufórica y descontrolada cantando todas las canciones pero con algunos inconvenientes puesto que de a rato venía desde la calle un barandaso de gas lacrimógeno que por momentos es imposible cantar, te agarra una picazón en la garganta que cada vez que uno respira parece que va a vomitar, pero el Pablito bancó la toma y el show continuó. Por momentos era un caos la gente le ganaba a la seguridad y subía al escenario a tratar de saludarme igual el Pablito bancó y el show continuó».

«El público chileno en ningún momento atentó contra nosotros, no nos golpearon ni se robaron nada, sólo querían el saludo y la foto!! El bondi fue entre la seguridad del escenario y los fans!! Yo argentino!! Saludos a todos los cumbieros del mundo entero. Yo el Pablito Lescano desde Chile dando la Nota!!», cerró.