Los alrededores del teatro Broadway perdieron el silencio y la tranquilidad que caracteriza a las calles rosarinas las tardes de domingo. Una larga fila de personas –la mayoría de ellos jóvenes- aguardaba sobre la vereda de calle San Lorenzo al 1.200. En los pocos minutos de espera, los presentes procuraban dejar algunas baldosas libres entre unos y otros y consultaban las pantallas de sus celulares. “Conociendo Rusia. 18 horas”, anunciaban los pixeles.

Un ingreso dinámico –previa declaración jurada en la aplicación CuidAR, registro de temperatura corporal y limpieza de manos- permitió que la sala del Broadway se llene a la brevedad. Sobre algunas butacas rojas irrumpían, como fuera de lugar, cintas que impedían que algunos asientos sean utilizados para garantizar el distanciamiento entre los presentes. Cosas de la “nueva normalidad”.

En un primer momento, el recital se iba a realizar en el patio del Centro Cultural Güemes, ubicado en Ovidio Lagos 154 bis, pero ante la posibilidad de una lluvia que nunca llegó y la gran concurrencia que tuvo el evento, se decidió trasladarlo al teatro Broadway (San Lorenzo 1.223), donde el grupo liderado por Mateo Sujatovich realizó dos presentaciones: una a las 18 y otra a las 20.30.

Unos minutos antes de las 18, y previo a que Conociendo Rusia haga su aparición en el escenario, la rosarina Ele Mariani deleitó con sus canciones a quienes iban llegando al teatro. Mientras los presentes se repartían entre aplausos, idas al baño y compras de cerveza, se hicieron las seis de la tarde y la sala se quedó a oscuras.

Bajo una tenue luz las cortinas subieron lentamente: Sujatovich al frente, Guillermo Salort detrás de la batería, Francisco Azorai en teclados, Juan Giménez Kuj en bajo, Nicolás Btesh en guitarra eléctrica y Feli Colina en coros y guitarra acústica, estaban en posición para dar inició a la primera función de la tarde-noche rosarina.

El show arrancó con “Tu encanto”, el último tema que lanzó el grupo y que en su versión de estudio cuenta con la colaboración de Fito Páez. Tras saludar a su público rosarino, Sujatovich bromeó con la fecha y preguntó si alguno de los presentes estaba festejando San Valentín. “Ya fue, ¿no? Bueno, un poco y un poco”, concilió.

Durante la hora y media que duró el recital, Conociendo Rusia hizo un repaso por su último disco, “Cabildo y juramento”, e interpretó “Puede ser”, “Otra oportunidad” –canción que dedicó a quienes “necesitan una segunda chance”- “Luces de neón”, “Quiero que me llames”, “30 años” y “Montaña infinita”.

Pero los temas del primer álbum, “Conociendo Rusia”, también estuvieron presentes. Para tocar “La Puerta”, Mateo solicitó la ayuda del público, que no dudó en corear a capela el estribillo del tema.

Pasada la mitad del primer show, la banda se retiró del escenario. Con una frase cargada de picardía, Sujatovich invitó a que los presentes lo ayude a cantar “una rancherita”: llegó la hora de “La Mexicana”, que fue coreada por el público detrás de los barbijos.

Luego de agradecer a los presentes y a los organizadores del show, el cantante destacó que el grupo estaba ansiando desde hacía un año poder “subirse a una combi, a un auto o a un avión” para reencontrarse con su público.

Los momentos más altos y rockeros del show, que se hicieron más fuertes sobre el final, fueron coronados por “Bruja de Barracas” y “A la vez”. Con toda una puesta en escena que incluyó un baile entre Sujatovich y Feli Colina al mejor estilo John Travolta y Uma Thurman, conociendo Rusia se despidió con “Loco en el desierto”.

Minutos antes de las 19.30, los músicos saludaron a su público con el deseo de un pronto reencuentro. Para respetar los protocolos, la salida de la sala se hizo paulatinamente y por sectores. Mientras tanto, en calle San Lorenzo ya se estaba conformando una nueva fila de personas, cuyos celulares mostraban en sus pantallas un ticket de ingreso que rezaba: “Conociendo Rusia. 20.30 horas”.

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