Por Mario Luzuriaga
Realmente fue impactante la nueva serie que trajo Netflix en su colaboración con Marvel. Una serie totalmente adulta, que no escatima en presentar violencia.
Pero esa violencia brutal tiene un destinatario específico: el sistema, las decisiones que toman los gobiernos. Marvel presenta a su héroe (en este caso su antihéroe) más brutal de todos: «The Punisher».
Frank Castle (Jon Bernthal) es un teniente de las Fuerzas de Reconocimiento de los Marines, pero también es un hombre de familia. Luego de su regreso del campo de batalla, donde sucede algo vital para la trama, su familia es asesinada y el fue su único sobreviviente. Después de su recuperación decide emprender una guerra sin cuartel frente a los responsables del crimen de su esposa e hijos. En esta oportunidad, y pensando que había terminado con los asesinos, le llega una información de que su guerra no había finalizado y que los culpables seguían vivos.
Es sabido que Marvel apunta a un cine más familiar, donde las peleas y muertes de personajes y villanos son más «fantásticas», por llamarlas de algún modo. Pero también en este gran universo convive «Punisher», un personaje que surgió en páginas de «Spider-Man» por los años ’70, pero que luego se popularizó por los 80, siendo el personaje sin super poderes, sus únicas habilidades fueron adquiridas por su entrenamiento militar.
Sus cómics fueron destinados para el público adulto por sus tramas contra narcotraficantes, mafiosos, militares, abusadores y muchos más. Punisher los combatía con una brutalidad absoluta y se puede ver en esta serie que no tiene reparos en mostrar a su personaje, por más que conviva con «Iron Man» o «Doctor Strange». Si bien hizo su aparición en la serie de «Daredevil», todos queríamos ver de nuevo a este hombre con su serie propia.
Lo jugoso de la serie es la crítica que se le hace a ciertos sectores del gobierno estadounidense, específicamente a la CIA, cuestionando fuertemente las operaciones encubiertas que hacen en países árabes, utilizando recursos militares para torturar y enfrentar «objetivos terroristas». Pero también hace hincapié sobre lo mal que regresan los soldados, luego de sus experiencias en el campo de batalla.
Todos los personajes están muy bien en sus roles como el de Ebon Moss-Bachrach como David Lieberman, también conocido como «Micro», con una historia similar a la de nuestro héroe. Ben Barnes como Billy Russo, un ex camarada de Castle, Amber Rose Revah como la incansable agente de Seguridad Nacional Dinah Madani y Deborah Ann-Woll como la periodista Karen Page, quien estuvo ya en el universo de «Daredevil».
Sin lugar a dudas «The Punisher» llegó para quedarse y junto con «Daredevil», son lo mejor que tiene el ya conocido Universo Marvel, que tiende un poco a cansar y aburrir con la tan esperada «Guerra del Infinito», que se desatará el próximo año con el estreno de la nueva «Avengers». A las claras está que los super héroes no sólo son cosa de chicos.
Calificación: Excelente.
