Netflix informó que se negará a transmitir en su plataforma canales estatales y de noticias de Rusia, que desde marzo se incorporarían por ley en ese país a los servicios de streaming, en el contexto de boicot y sanciones internacionales tras la invasión a Ucrania iniciada el último jueves.

Un vocero de la compañía indicó ante una consulta del sitio especializado The Hollywood Reporter que «dada la situación actual, Netflix no tiene planes de incorporar esos canales a su servicio».

En diciembre, el regulador de telecomunicaciones ruso puso a Netflix dentro de la categoría de empresa de servicios audiovisuales, lo que implica que la plataforma de streaming deberá transmitir canales con más de 100 mil televidentes diarios, entre los que se incluye las principales señales de aire, como el estatal Canal 1, y emisoras de noticias como Spas, manejada por la Iglesia Ortodoxa de Rusia.

Este martes, a partir de la vigencia de la nueva regulación rusa, se le exigirá a Netflix que aloje en su plataforma a los 20 principales canales del país, muchos de los cuales manejan una línea editorial propagandística a favor de Vladímir Putin.

No es clara la estrategia de Netflix en cuanto cómo seguir, ya que su desafío a la normativa local impactará su servicio en Rusia, donde tiene planes de producir la primera serie originar en ese país basada en la novela clásica de Tolstoy, Anna Karenina, además de otras ficciones locales y películas que quedarían sin realizarse.