El documental El laberinto de las Lunas se estrenó con éxito en su primera proyección, en una Sala Arteón que emanaba el calor de los corazones latiendo de quienes disfrutaron de una producción realizada con arduo trabajo y con mucho esfuerzo de un equipo técnico que entendió el desarrollo de esta película como un desafío necesario para visibilizar una temática real, pero con poco entendimiento de una «sociedad con muchos prejuicios».

El film se propone visibilizar la vida de las infancias trans y la cotidianidad de la maternidad travesti. El documental contiene testimonios de vida de Karla Ojeda y Maira Ramírez, dos travestis que atraviesan la adopción y Gabriela Mansilla, mamá de Luana, la primera niña trans en recibir su DNI.

En la presentación estuvieron presentes las protagonistas de dicho documental, como el equipo técnico y su directora, Lucrecia Mastrangelo, como también autoridades que tienen que ver con la estructura cultural de la ciudad y la provincia, a saber,  Guillermo Ríos, secretario de Cultura de Rosario, y la «Chiqui» Gonzalez, ministra de Innovación y Cultura de la provincia de Santa Fe.

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Conclusión dialogó con su directora, Lucrecia Mastrangelo, quien expresó su alegría por el estreno. Ella dijo: «Estoy muy nerviosa, muy contenta y muy agradecida a todo el equipo técnico y a todos los que laburamos a puro pulmón. Agradecida por la cantidad de gente y ojalá podamos hacer muchas más proyecciones».

«Yo creo en el arte como una herramienta de liberación, para poder dar dignidad a la gente que la ha perdido, resignificar su vida, levantar su autoestima. Me parece que el arte tiene mucho para dar en ese sentido», sostuvo la directora del documental.

Por su parte, una de las protagonistas, Karla Ojeda, al preguntarle sobre la sensación que le da el estreno, expresó que «me siento muy ansiosa. Nada de nervios porque así es mi vida. Yo ya la conozco y conozco la vida de la otra protagonista, Maira. Me siento muy feliz y quiero ver la peli«.

La otra protagonista del documental, Maira Ramirez, dijo que «para mí es un acontecimiento muy esperado, porque más que yo sea madre travesti, nunca esperé estar en una pantalla gigante. Pero si me siento muy emocionada». Y agregó: «La sociedad nos discrimina mucho. Yo me siento mujer y yo soy madre. La sociedad tiene que ver que somos personas normales como cualquiera».

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Guillermo Ríos, secretario de Cultura de Rosario, quien estuvo presente en el estreno, expresó que «es una temática que se vive mucho, que a lo mejor no es tan visible, pero como siempre el arte pone ante nosotros un tema, lo hace visible y lo metaforiza con las herramientas que da el lenguaje audiovisual. Estoy muy contento de estar en este estreno».

«Todavía nos queda mucho por hacer. Mucho por deconstruir. El arte nos ayuda a ver otro mundo, a desarmar prejuicios. Bienvenido sea este lenguaje», concluyó el secretario de Cultura.