En una extensa entrevista brindada a la revista norteamericana Variety, el hombre que mantiene su vigencia en el cine de acción a sus 73 años se quejó también de que nunca pudo obtener los derechos de propiedad de Rocky y que por ello obtuvo sólo una fracción del dinero que le correspondía como creador del boxeador.

«Después de que ‘Rocky II’ saliera e hiciera un montón de dinero y luego ‘Rocky III’ golpeara y ganara aún más, dije que me gustaría tener algo de propiedad, ya que lo inventé. Y eso nunca sucedió. Así que no tengo ninguna propiedad de Rocky», relató acerca del personaje que apareció hasta ahora en ocho filmes desde 1976.

Aquella cinta original fue un éxito rotundo de público y crítica, al punto que obtuvo tres premios Oscar de la Academia de Hollywood, incluyendo nada menos que los galardones a mejor película, mejor director para John G. Avildsen y mejor edición.

El mismo Stallone consiguió dos nominaciones por la cinta, como mejor actor protagónico y mejor guión original.

Luego llegarían cinco secuelas y dos spin-offs, “Creed” y “Creed II”, en las que Stallone encarna ya a un Balboa entrenador del hijo de su antiguo rival y amigo Apollo Creed.

«Estaba muy enfadado. ‘Rocky’ está en la televisión en todo el mundo más que cualquier otra película ganadora del Oscar que no sea ‘El Padrino’. Hay seis entregas, y ahora tienes Creed y Creed II», dijo Stallone.

Pese a esos dolores de cabeza en términos de derechos de explotación y dividendos por los filmes, el actor aseguró que estaba interesado en continuar con la saga.

Por un lado, manifestó interés en producir una serie de televisión que funcionaría como una precuela de las películas, antes de que Rocky se convirtiera en un boxeador de renombre.

Su segunda idea es una nueva secuela de la saga de “Rocky” ambientada en el presente, tras los hechos ocurridos en “Creed II” de 2018.

«Rocky conoce a una persona joven y enfadada que se ha quedado atrapada en el país cuando viene a ver a su hermana. Lo incluye en su vida, comienzan increíbles aventuras, y terminan al sur de la frontera. Es muy, muy oportuno», contó a Variety el actor, que pretende así abordar el espinoso tema de la inmigración en Estados Unidos a través de su personaje más famoso.