A raíz de una imputación de oficio presentada por el gobierno de la provincia de Buenos Aires, Netflix cambió sus condiciones de uso en Argentina, ya que su actualización de normas en cuanto al uso del servicio tenía claúsulas «abusivas» para los consumidores en el país.

Al respecto, la plataforma de streaming quería regirse, desde el 5 de enero, por leyes del Estado de Delaware (Estados Unidos), con procedimientos que no estaban contemplados en el Código Civil y Comercial de la Nación, según indicó el Ministerio de Producción, Ciencia e Innovación Tecnológica.

Entre las normas dejadas sin efecto, una establecía que los pagos realizados por el consumidor nunca serían reembolsables por la empresa, limitando la posibilidad de reclamo y estableciendo que nunca se otorgaría crédito en favor del usuario.

Otra cláusula imponía la renuncia de los consumidores a iniciar reclamos y a participar en acciones colectivas en defensa de sus derechos.

Por último, una tercera determinaba que los términos de uso se regirían por leyes estadounidenses del Estado de Delaware.

Además, se logró adecuar las condiciones en referencia a la cancelación de la suscripción, ya que la anterior disposición limitaba el poder del usuario y su derecho a contratar por libre elección.

A través de las distintas redes sociales, el gobierno bonaerense dio a conocer las modificaciones: