En medio de la ola de violencia que arrasa en la ciudad de Rosario y en distintos puntos de la provincia, se busca seguir el rastro de una inmensa cantidad de municiones y armas.
Según la acusación, el policía violó los deberes de debido resguardo del armamento posibilitando que terceras personas sustrajeran pistolas pertenecientes a la Policía de Santa Fe.
En la jornada de este jueves, la Agencia de Investigación Criminal de la Policía de Santa Fe realizó varios allanamientos donde se secuestraron armas de fuego de grueso calibre, vehículos y una gran suma de dinero.
La justicia determinó que el grupo operaba en tres domicilios ubicados en barrio 9 de Julio de Villa Constitución.
Los procedimientos a cargo de la fiscalía de San Lorenzo y la Agencia de Delitos Complejos se realizaron con el fin de dar con los asesinos de Gerardo "Pecho" Pérez y del adolescente Brian "Runi" Sánchez, asesinados el pasado 26 y 29 de mayo, respectivamente.
El director de la Agencia de Prevención de Violencia con Armas de Fuego, Lautaro Sappietro, dijo que recorrió “las armerías institucionales de 12 Unidades Regionales de la provincia para realizar una inspección, inventariar todo lo que hay en ellas y recolectar todos los elementos que luego serán destruidos por el Anmac”.
El hecho ocurrió este fin de semana y los efectivos denunciaron que se trató de una emboscada. Alrededor de 30 personas los atacaron con palos y piedras y robaron una escopeta. En tanto los vecinos se quejan de la creciente inseguridad.
Ocurrió este martes en la zona sudoeste de la ciudad, cuando efectivos del Comando Radioeléctrico intentaron identificar a dos personas que circulaban en un Peugeot 206 y los mismos se dieron a la fuga.
El principal sospechoso de asesinar a Sergio Almirón, quien murió el pasado miércoles en el Heca luego de ser baleado el martes en Capitán Bermúdez, fue arrestado en su domicilio por la Policía de Santa Fe. Secuestraron armas y estupefacientes.
Sucedió en la noche de este lunes, cuando efectivos que patrullaban la zona escucharon detonaciones y se inició una persecución.
El presidente ruso aseguró que su país no tiene la intención de hacer la guerra a nadie sino que el objetivo es "crear condiciones para que a nadie se le pase por la mente lanzar una guerra contra Rusia".
"Mientras estamos reunidos aquí para rezar y reflexionar sobre la paz y el destino de los pueblos que bordean el Mediterráneo, al otro lado de este mar se está produciendo una inmensa tragedia", manifestó el sumo pontífice.