Luego de la muerte de 20 gazatíes en un ataque israelí previo a un reparto de ayuda, representantes de Hamas presentaron un posible nuevo acurdo a los mediadores.
El desorden en la división de inteligencia militar y la gestión de asuntos operativos y personales fueron las causas de los desacuerdos entre la fuerza militar y el gabinete del primer ministro Benjamin Netanyahu.
El Jefe de Estado, quien viaja en un vuelo de línea, iniciará su segunda gira internacional desde que fue ungido con la Primera Magistratura nacional, en un periplo que lo llevará a reunirse con las máximas autoridades de Italia e Israel, y que tendrá un capítulo de particular relevancia por la agenda que mantendrá en el Vaticano.
La propuesta de la comunidad internacional volvió a tomar fuerza después de la última fase del conflicto en la Franja de Gaza. La primera ministra italiana, Giorgia Meloni, y el “número dos” de la Santa Sede lamentaron que el premier israelí siga negando esa posibilidad.
“Hasta ahora hemos traído a casa a 110 rehenes y pretendemos traerlos a todos de vuelta; estoy trabajando sin descanso en esto, pero seamos claros: rechazo categóricamente las condiciones de Hamas”, afirmó el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu.
Las protestas antigubernamentales que sacudieron la nación durante gran parte de 2023 cesaron tras los ataques de Hamás en el sur de Israel el 7 de octubre. Las desavenencias políticas quedaron a un lado cuando los israelíes se unieron en torno al Ejército y a las familias de los muertos y rehenes.
La guerra estalló el 7 de octubre por el ataque de milicianos de Hamás en suelo israelí desde la Franja de Gaza, que mataron a alrededor de 1.200 personas, en su mayoría civiles.
Algunos manifestantes pidieron además un alto el fuego, informó el diario Haaretz. Además, familiares de rehenes y desaparecidos por la incursión de Hamas anunciaron que realizarán el domingo una concentración en Tel Aviv para conmemorar los 100 días de los secuestros y exigir la liberación de estas personas.
Los ataques sobre Al Maghazi y Al Bureij, en el centro del enclave palestino, dejaron ocho muertos en una casa y obligaron a muchas personas a huir a Rafah, en la frontera con Egipto.
El incidente tuvo lugar en una zona de combate activa, en la que se han producido continuos enfrentamientos durante los últimos días. Benjamin Netanyahu, calificó la muerte de los tres rehenes como una "tragedia insoportable".
Si bien agregó que "hará falta más tiempo", consideró que "la guerra está en pleno apogeo" y que este es "el principio del fin" para el grupo islamista palestino.
A su vez, el primer ministro israelí también agradeció al libertario "su intención de trasladar la embajada argentina a Jerusalén", según informó la oficina personal en su cuenta de la red social X.