La medida de fuerza adoptada el martes tuvo un elevado acatamiento en rechazo de "la insistencia del Gobierno porteño de incumplir el decreto presidencial y procurar la presencialidad en las escuelas" de la ciudad de Buenos Aires.
La Ciudad Autónoma comunicó que abrirán las escuelas este miércoles 21 de abril, hasta tanto no se resuelva la situación judicial. "Hasta que la Corte se expida las escuelas en la Ciudad de Buenos Aires continúan con el dictado de clases", expresa el escrito.
La ocupación de camas llegó prácticamente a su límite en la provincia, por lo que desde el Gobierno estudian medidas para intentar descomprimir hospitales y sanatorios.
Según un relevamiento online del organismo de la ONU para la educación, Unesco, el continente que en su conjunto mantuvo más tiempo esta medida fue América, casualmente la región del mundo donde la pandemia parece haberse ensañado más hasta ahora.
Los gremios que decidieron la protesta son UTE, Ademys, Sadop y ATE después de que una sentencia de la Justicia de la ciudad de Buenos Aires avalara la decisión impulsada por el Jefe de Gobierno de la capital argentina.
El jefe de Gabinete explicó que la decisión de suspender la concurrencia a las escuelas durante quince días obedece al "récord de contagios" de coronavirus en el Área Metropolitana Buenos Aires (Amba).
La procuradora ante la Corte Suprema, Laura Monti, sostuvo que "la Ciudad tiene el mismo puesto que las provincias en el sistema normativo que rige la jurisdicción de los tribunales federales y, por lo tanto, el mismo derecho a la competencia originaria de la Corte Suprema de Justicia de la Nación".
La ministra de Educación de Santa Fe indicó que en las escuelas se cumplen los protocolos, pero llamó a la población a cumplir con las medidas sanitarias para poder sostener la presencialidad.
En una carta sostienen que es “inoportuno e irresponsable reclamar o solicitar más clases presenciales sin contextualizar y sin pensar qué podría suceder si las instituciones educativas estuvieran funcionando a puertas abiertas”. Se consolida el debate ante la suba de contagios producto de la pandemia.
Luego de asegurar ayer, que no se cerrarían las escuelas, el ministro de Educación de la Nación cambió su postura al aseverar que "se deben restringir las actividades no prioritarias" para evitar volver a la virtualidad total.
El gobernador señaló que eso es lo que llevó a priorizar la vacunación de los docentes. Sin embargo, no descartó que se implementen "medidas más severas" en el caso que la situación epidemiológica de algunas zonas de la provincia lo amerite.
La entidad gremial reclamó "el regreso temporalmente a las actividades a distancia hasta que estén dadas las condiciones óptimas de resguardo sanitario".