El primer coche bomba estalló en el distrito de Karrada, en el centro de la capital iraquí. El otro atentado tuvo lugar en Al-Shahada Bridge. Uno de los ataques fue reivindicado por el grupo yihadista Estado Islámico (IS), según un informe de las autoridades iraquíes.
El ataque fue perpetrado por presuntos islamitas radicales en la puerta de un restaurante de Mogadiscio y ocurre dos meses después de que el país del Cuerno de África eligiera un gobierno tras décadas de anarquía.
El ataque se perpetró mediante un coche bomba y apuntó contra los miles de civiles que huían de la guerra en las localidades de Fua y Kafraya y que estaban siendo trasladados a territorios bajo control del Gobierno de Damasco.
"Fue un coche bomba, estaba aparcado en el mercado, pero en este momento no está claro si se trata de un atentado suicida", dijo a la AFP el funcionario del gobierno local Shahid Ali Jan.
Nueva ola de ataques contra la capital de Irak. El primer atentado fue en un mercado popular reivindicado por milicianos islamistas del EI y el segundo un coche bomba estalló en una plaza pública.
La explosión del se da en medio de una relativa calma luego de que hace una semana, con la mediación de Turquía y Rusia, se acordara un alto el fuego que se ha cumplido con algunas excepciones.
Así lo informó la agencia oficial siria de noticias SANA, que cita fuentes policiales y sanitarias y precisa que el ataque se produjo cerca del estadio municipal El Baladi, en la localidad siria de Yabla.
Los fiscales detectaron la existencia de restos metálicos que había sido sustraídos de cuerpo de varias personas fallecidas en el atentado. Coinciden con las piezas del vehículo recogidas en el lugar y peritadas en 2002.
La ola de violencia no cesa para los turcos, y esta vez el aparcamiento de la gobernación de Adana fue la sede del ataque terrorista, realizado en la mañana de este jueves.
El atentado suicida, perpetrado en Amriyat al Faluya, un pueblo de la provincia de Anbar, a unos 40 km al oeste de la capital iraquí, dejó además unos 30 heridos.
"Se desbarató un atentado", declaró el presidente francés François Hollande desde Atenas y que hay que hacer un llamamiento a una "vigilancia reforzada".
El coche, un Peugeot 607, no tenía matrícula y estaba estacionado el sábado por la noche cerca de ese monumento, con las balizas encendidas pero sin ocupantes en su interior.