Desde el gobierno norcoreano afirmaron que se alistaron cuando el régimen del líder Kim Jong-un amenazó con duras represalias por las nuevas sanciones de la ONU. Trump aseguró que su país está "listo para el combate".
El presidente norteamericano volvió a utilizar su cuenta de Twitter para tensar relaciones con el país asiático. “Las soluciones militares están listas para ser desplegadas si Corea actúa de forma imprudente”, publicó.
Donald Trump redobló su fuerza contra Corea del Norte, que amenazó abiertamente con atacar el territorio estadounidense de Guam, en el Pacífico. "Fuego e ira", dijo el presidente de Estados Unidos.
El organismo adoptó por unanimidad una serie de nuevas medidas contra Corea del Norte, que incluyen una prohibición a la importación de bienes de ese país, que representarían 1.000 millones de dólares en ingresos anuales.
Ambos países coincidieron en la necesidad de tomar nuevas acciones contra la amenaza nuclear y misilística que representa Corea del Norte y volvieron a presionar a China para que participe también de las sanciones.
Así lo insinuó el presidente estadounidense después de que el hermético régimen lanzara el viernes un misil balístico intercontinental. Por su parte, el líder norcoreano Kim Jong-Un dijo tras el ensayo que "todo el territorio continental de Estados Unidos" está a su alcance.
Así lo informaron Estados Unidos, Japón y Corea del Sur, en una nueva escalada en la crisis internacional con el régimen comunista. El Pentágono fue el primero en informar sobre esta prueba de poderío norcoreano. El proyectil cayó en aguas del Mar de Japón.
Fuerzas estadounidenses y surcoreanas realizaron un ensayo armamentístico, en respuesta al misil balístico intercontinental efectuado el martes por Corea del Norte.
El país asiático disparó el proyectil desde la base aérea de Panghyon, que alcanzó una altura de 2.802 kilómetros y recorrió 933 kilómetros en 39 minutos hasta caer en el Mar de Japón.
El joven norteamericano, identificado como Otto Warmbier, falleció este lunes en su Ohio natal, luego de ser entregado sin estímulos, la semana pasada, a su familia en Estados Unidos.
Se trata de la cuarta prueba del régimen comunista en las últimas cinco semanas, en desafío a las advertencias de la ONU y a las amenazas de Estados Unidos de una posible respuesta militar.
Con este, ya son nueve los ensayos de estas características en lo que va de este año y el tercero desde que Moon llegó a la presidencia surcoreana. El anterior tuvo lugar el pasado 21 de mayo.