El informe semanal que confeccionan el Ministerio de la Producción provincial y la Bolsa de Comercio de Santa Fe precisa que al final del ciclo de cultivo se cosecharon 375.900 hectáreas, con un rendimiento promedio de 36,75 quintales y una producción total de 381.430 toneladas.
La proyección de diciembre subió en 1,7 millones de toneladas desde la medición de noviembre. La entidad subrayó que el área de siembra trepó a 6,9 millones de hectáreas, la mayor de los últimos 19 años.
Además, el grano de maíz destinado a la industria alcanzó un récord histórico a la fecha, con un crecimiento interanual del 10%.
Se da a través de un dispositivo que organiza cultivos intercalados en forma de “hilo de caracol”.
Desde su pico máximo en el ciclo 2014-2015, cuando la soja se sembraba sobre soja casi sin mediar otro cultivo, se pasó a la actual estrategia de sembrar tres cultivos en dos años, de los cuales dos son gramíneas, trigo y maíz.
En los departamentos del centro y norte de la provincia se sembraron en esta campaña unas 935.000 hectáreas de soja de primera, mientras que de soja tardía o de segunda se utilizaron 517.000 hectáreas.
Pedro Salas es abogado y referente agrario indiscutido en una de las provincias que más aporta en términos de agroindustria y comercio exterior. En una jugosa entrevista, se refirió al conflicto patrimonial en la familia del ex ministro y otros temas algo más urgentes para el país, como dólar, sequía o rumbo económico.
La Bolsa de Cereales porteña consideró que “el déficit hídrico y las heladas causaron mermas de hasta un 60% sobre el potencial de rinde, y las lluvias de esta semana no tendrían impacto” en una mejora.
Las recientes lluvias parecen haber dado el puntapié inicial para comenzar a revertir la necesidad de milímetros de agua en la región pampeana. Esta situación genera alarma no sólo en productores afectados, sino en el Gobierno, por la imperiosa necesidad de reservas, ante lo que una mala cosecha 2020/2021 agravaría mucho el cuadro financiero.
De esta manera, la región comprendida entre el norte bonaerense y centro sur de Córdoba y Santa Fe aportará el 35% de las 50,5 millones de toneladas previstas a nivel nacional para la presente campaña.
Una encuesta arrojó que la situación sanitaria todavía no afecta mucho al campo, aunque gran parte de los participantes admitió que debió modificar rutinas.
Desde la Bolsa de Comercio de Rosario calificaron de “espectacular” a la campaña. Por cuestiones de metodología, la cifra de casi 20 millones de toneladas difiere de la de Buenos Aires.