Francisco llega al sureste de la isla, una provincia agrícola y un lugar emblemático por la cruz de cinco metros construida en 1790 en lo alto de una colina. Allí bendecirá a la cuarta ciudad del país.
Así se expresó el papa Francisco refiriéndose al conflicto existente en Colombia, durante la misa que celebró en la Plaza de la Revolución de la capital cubana ante más de 100.000 personas.
En el segundo día de su visita a Cuba, miles de personas se congregaron este domingo antes del amanecer para participar de la ceremonia. Tanto Raúl Castro como Cristina Kirchner estarán presentes.
La Presidenta mantuvo una reunión privada con su par de Cuba en la que repasaron temas relativos a América latina, el Caribe y otros de trascendencia global.
El pontífice fue recibido por presidente Raúl Castro y el cardenal Jaime Ortega, máximo representante de la Iglesia católica en la isla.
El sumo pontífice se quedará en el país del Caribe durante tres días, lapso en el cual visitará las ciudades de La Habana, Holguín y Santiago de Cuba para luego viajar a los Estados Unidos.
La Presidenta arribó esta mañana a la isla caribeña para presenciar la misa que Francisco oficiará el domingo en la Plaza de la Revolución, donde está todo listo para recibir a un millón de fieles.
El secretario de Estado de la Santa Sede, Pietro Parolín, explicó en una entrevista los motivos que llevaron siempre al Vaticano a pronunciarse contra el bloqueo a la isla caribeña.
Con el objetivo de tender puentes entre estos dos países, Francisco ofrecerá 26 discursos, 8 en el país caribeño y 18 en territorio americano. Además, pidió "una solución no violenta en Siria e Irak".
Francisco tendrá una frenética agenda que coincide con la llegada de 170 líderes para la Asamblea General de la ONU. Además, es posible que con su visita a Cuba se reúna con Fidel Castro.
La medida se hará efectiva en las próximas 72 horas, para reclusos mayores de 60, menores de 20 sin antecedentes penales, enfermos, mujeres y quienes iban a obtener libertad condicional en 2016.