Un joven de 18 años, de nacionalidad paraguaya, que manejaba el auto en el que fueron llevadas hasta el descampado, y el titular del vehículo, de 30 años, fueron imputados esta viernes por femicidio, homicidio criminis causa, robo calificado, portación ilegítima de arma de guerra y falsa denuncia.
La fiscal Georgina Pairola remarcó que si bien está relacionado con el mundo de las drogas, aún está tratando de determinar las razones del feroz ataque a balazos que acabó con la vida de Marcos Caminos y su hijo de un año.
El operativo se llevó adelante en el domicilio donde vivían Marcos Máximo Caminos y su hijo Ciro, de un año, quienes fallecieron este sábado tras ser atacados a balazos, un episodio en el que también resultó gravemente herida Micaela B.
Según testigos, las víctimas fueron al campo del acusado a reclamar una deuda de dinero, que el hombre desconoció, lo que derivó en una discusión, tras lo cual el dueño del terreno les disparó.
El ataque ocurrió durante la tarde de este lunes en la zona de Pasaje Ghandi y Teniente Agneta, cuando dos personas que se desplazaban en moto balearon una vivienda y asesinaron a dos individuos que se encontraban en su interior.
El fiscal Alejandro Ferlazzo aseguró que los disparos con que los jóvenes de 18 y 22 años fueron ejecutados se realizaron a muy corta distancia y todos en la zona de la cabeza. De acuerdo a sus dichos, la relación entre ambos era de amistad.
Este miércoles fue reconocida la segunda víctima del doble homicidio donde también perdió la vida el panadero Gaetano Di Bartolomeo. Se trata de Lautaro Manuel Sandez, de 19 años, quien fue identificado luego de que su familia realizara una denuncia por averiguación de paradero ya que el joven no había regresado a su casa en las últimas horas.
Ocurrió este sábado, alrededor de las 20.30 en inmediaciones de Pasaje 516 y 509. El joven falleció en el lugar con un disparo en el pecho y su padre en el Hospital Roque Saénz Peña con heridas en abdomen y tórax.
Una junta médica dictaminó que el acusado de matar a su mujer y su hija de dos años “no tiene capacidad mental para comprender el hecho que cometió ni está en condiciones de afrontar un proceso penal”.
Se trata del joven que apuñaló a su mujer y a su hija de dos años en octubre pasado. La junta médica determinó que no puede ser imputado por “no comprender la materialidad de los hechos”. Padece desorganización del pensamiento y sufre alucinaciones.
Mediante un comunicado, la comuna expresó que “atento a la gravedad del caso, la colonia de Oliveros no es un lugar adecuado para alojar a dicho imputado”.
Una mujer y su hija de dos años fueron asesinadas este martes por la mañana en barrio Acindar. Se presume que la pareja de la mujer y padre de la niña fue el responsable.