Cinco personas se encontraban en el recinto cuando dos atacantes entraron y provocaron el ataque. La víctima fatal tenía 84 años. El Papa dijo que compartía el "dolor y horror" por este "asesinato bárbaro".
"En el celular del hombre se encontró un video con una amenaza en árabe en la que anuncia un atentado contra Alemania en nombre del Islam", anunció el ministro del Interior del estado alemán de Bavaria.
El grupo extremista reivindicó el ataque afirmando que su objetivo eran soldados del ejército iraquí y miembros de unidades paramilitares progubernamentales. Hubo además al menos 29 heridos.
La policía halló indicios que apuntarían que el joven sentía fascinación por los asesinatos en masa y que recopilaba información sobre "cuestiones vinculadas con desequilibrados".
La organización difundió este jueves, a través de la red, un video de cinco minutos anunciando nuevos atentados en el país europeo en represalia de la política exterior francesa en el cercano Oriente.
Entre las víctimas hay 11 niños y decenas de civiles resultaron heridos, muchos de los cuales se encuentran en un estado grave. La aldea de Al Tujar, donde ocurrió el hecho, está en manos del grupo yihadista Estado Islámico.
El atacante hirió a tres personas de gravedad y una cuarta resultó herida levemente cerca de Würzburg en el sur del país, en lo que las autoridades califican de probable "atentado islamista".
En un comunicado, la agencia Amaq, que cita "fuentes de seguridad" de la propia milicia yihadista, dice que el ataque fue cometido por "un soldado del Estado Islámico", según el portal de información especializado SITE.
La manifestación fue convocada por el influyente jefe chiita Moqtada Sadr para exigir un nuevo gobierno compuesto por tecnócratas y capaz de implementar reformas prometidas desde hace un año.
Así lo informó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH), que precisó que el EI alcanzó al aparato, que sobrevolaba la zona de Yebel Zarda.
Es el peor ataque en la capital iraquí en lo que va del año, donde más de 130 personas resultaron heridas. El primer ministro Haider Al Abadi prometió "castigar" a los responsables.