Los fallecidos luego de la detonación de una bomba en el metro de San Petersburgo suman once personas y trece permanecen heridos. Desde el gobierno no descartan la teoría del atentado.
Ocurrió esta mañana en la estación de la plaza Sennaya. Según las primeras informaciones, hay unos 20 heridos. El presidente de Rusia, Vladimir Putin, estaba en dicha ciudad al momento del incidente.
El juez Pedro Boasso hizo lugar a una medida cautelar e intimó a la Municipalidad y al consorcio del edificio a realizar las acciones necesarias en un plazo de 20 días. De no hacerse, se aplicarán multas por incumplimiento.
Se trató de una deflagración, una combustión que estalló cuando las víctimas soldaban un tanque. Ambos resultaron con quemaduras serias, el mayor, de 70 años, en el 40 por ciento del cuerpo y el menor, de 36, en el 60 por ciento.
Se trata de dos jóvenes que circulaban en un automóvil detrás de uno de los colectivos siniestrados ayer en la ruta 33 que aseguraron haber escuchado “la explosión” que le hizo “perder el control”.
Los policías estaban realizando un operativo de seguridad alrededor de la Plaza de Toros para contrarrestar las protestas de animalistas. Las corridas estaban suspendidas desde hace cuatro años y se reanudaron en enero.
Más de 3.000 botellas explotaron poco después de las 21H00 GMT del viernes y durante una hora en Jonquières, a unos 30 km de Aviñón (sur).
Las autoridades se apresuraban a limpiar la playa con más de 300 esqueletos de ballenas muertas y cerraron el acceso al público por riesgo sanitario a raíz de la descomposición de los cuerpos.
Mientras la nave hacía las maniobras de despegue en el aeropuerto John Fitzgerald Kennedy se produjo un incendio que terminó en explosión. Afortunadamente todos los pasajeros fueron evacuados y no hubo que lamentar heridos.
El hecho ocurrió hoy en la planta de Flamanville, en el norte del país, aunque fuera de la zona nuclear. "Es un acontecimiento técnicamente significativo pero no se trata de un accidente nuclear", dijo un responsable de la prefectura.
El atentado iniciado con un coche bomba contra un puesto de control provocó hoy la muerte de al menos siete policías y un transeúnte. Además, hubo ocho personas heridas durante el incidente.
La policía rodeó el barrio y busca a un tercer atacante, de unos 1,70 metros de altura, ataviado con ropa negra y boina blanca, informaron fuentes policiales citadas por la agencia de noticias EFE.