El jefe de la policía afirmó que se trata de ataques suicidas que alcanzaron un autobús. Los talibanes reivindicaron el ataque. Varios testigos afirman que las explosiones fueron seguidas.
El concejal solicitó información sobre lo ocurrido el lunes en el laboratorio de Alem al 2900, ya que anticipa una posible corresponsabilidad municipal respecto a denuncias, estado de habilitación e inspecciones.
A 24 horas del estallido del laboratorio Apolo, Conclusión recorrió la zona de Alem al 2900, y recogió la voz de quienes, de una u otra forma, fueron afectados por el desastre.
La concejala Fernanda Gigliani presentó un pedido de informe para saber el estado en que se encontraba, si su habilitación estaba vigente, y si se le había controlado su inscripción en el registro de precursores químicos.
Lo confirmó a Conclusión el subdirector del área la Municipalidad, Gonzalo Ratner, quien adelantó que los daños “son menores y no estructurales”. Igual cuadrillas continúan trabajando en la zona.
El subsecretario de Control y Convivencia Guillermo Turrín informó sobre la labor durante y después de la explosión y otras circunstancias previas referidas al desempeño de la actividad del laboratorio.
Así lo expresó uno de los ingenieros de la Dirección General de Obras Particulares, quien explicó que además de los heridos y los daños materiales del laboratorio, son muy importantes los daños colaterales de las viviendas linderas.
Sucedió en un laboratorio de suero fisiológico ubicado en zona sur, específicamente en Alem al 2900. La hipótesis más fuerte sostiene que una caldera de las instalaciones sufrió una avería.
Fue por la explosión de un coche bomba este martes en Jordania donde se encuentran decenas de miles refugiados sirios que huyen de la guerra. El ataque acentúa el temor de que los yihadistas logren infiltrarse.
El incidente ocurrió en la tarde de ayer en una empresa ubicada sobre la ruta 9, en la localidad de Alvear. El trabajador sufrió quemaduras de segundo grado en la parte superior del cuerpo.
A tres décadas del suceso, se estima que las víctimas letales rondan las 500.ooo personas, debido a la radiación que perdura en el lugar. Entre las víctimas se encuentran los rescatistas, que dieron su vida por salvar a la humanidad de un desastre aún mayor.