La Iglesia colombiana anticipó que la "reconciliación entre los colombianos" luego del conflicto armado de más de medio siglo con las FARC y la "defensa de los derechos humanos" serán dos de los ejes que abordará el Pontífice.
Movimientos feministas calculan, según una encuesta, que 875.437 mujeres fueron víctimas de abusos entre 2010 y 2015 en el contexto del conflicto armado y que el 78% no efectuaron denuncias.
Los rebeldes concluyeron este martes su desarme y ahora pasarán a ser un partido de izquierda. "Con esta dejación de armas (...), el conflicto realmente termina y comienza una fase nueva en la vida de nuestra nación", proclamó el presidente Juan Manuel Santos.
La antigua guerrilla se presentará el 1 de septiembre como un espacio legal, piedra angular del acuerdo de paz de Colombia luego de su desarme al cabo de más de 50 años de lucha armada.
La Justicia Especial para la Paz otorgó la libertad condicional o canceló órdenes de detención a miembros de las fuerzas públicas y se aguarda la definición de unos 1.400 sumarios más.
El grupo guerrillero completó el proceso de dejación de armas ante la Organización de las Naciones Unidas luego de más de 50 años. En el acto estuvieron el presidente colombiano José Manuel Santos y el líder de las FARC Rodrigo Londoño.
Rodrigo Londoño, líder de la organización, analiza la posibilidad de persistir con su accionar bélico debido al no cumplimiento del acuerdo de paz por parte de las fuerzas de seguridad.
La prórroga se acordó a raíz del retraso que sufrió el cronograma establecido por las partes tras la firma del acuerdo de paz, el 24 de noviembre de 2016.
Representantes de ambas partes comenzaron una reunión de dos días para acelerar la implementación del acuerdo de paz que firmaron para poner fin a un violento conflicto armado de más de medio siglo.
La ministra de Exteriores de Colombia, María Angela Holguín, comunicó que en junio se completará "el desarme y desmovilización total" de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia.
Este lunes la guerrilla activa se adjudicó un ataque que fue repudiado por el gobierno de Juan Manuel Santos, quien advirtió que así no se alcanzará el cese al fuego que ambas partes anunciaron buscar.
El jefe de la misión de la Organización de Naciones Unidas en Colombia, Jean Arnault, argumentó retraso en las construcciones de las zonas de reunión en las que los guerrilleros deben desmovilizarse.