Advierten que la enorme burbuja de la deuda de los países del sector en desarrollo
El presidente Andrés Manuel Pérez Obrador rechazó los pedidos del organismo y no dudó en darle recomendaciones para que rescaten a los puebles y no a las grandes corporaciones.
Al exponer en la cuarta reunión de Ministros de Finanzas y Presidentes de Bancos Centrales del G20, explicó que la Argentina está "en proceso de conversaciones con el Fondo para un nuevo programa y hemos estado trabajando de manera constructiva".
La directora del organismo internacional señaló que el país tiene "desafíos muy dramáticos" a raíz de una "profunda recesión" que lleva a que "las condiciones sociales estén empeorando".
El ministro de Economía participó de la Reunión de Ministros y Gobernadores del G24, donde coincidió con la directora del FMI, Kristalina Georgieva y destacó el "rol de la política fiscal para la recuperación de la economía".
Según el Fondo, la mayoría de las economías emergentes empeoró su situación y las proyecciones a la baja se acentuaron.
En un comunicado emitido este lunes en Washington, el Fondo consideró que "un conjunto comprensivo de políticas podría respaldar el restablecimiento de la confianza, pero deberá ser apropiadamente calibrado para fomentar la recuperación económica y asegurar la estabilidad".
La misión del FMI en Argentina culmina este domingo y podría regresar en noviembre con el objetivo de seguir analizando la situación económica y social del país y definir las condiciones para refinanciar la deuda.
El organismo de crédito internacional con el que Argentina mantiene una cuantiosa deuda tras el préstamo solicitado en 2018, envió representantes al país para evaluar el avance de la gestión. Visitaron la UIA y la CGT y se enfocaron en dos sectores puntuales: el campo y Vaca Muerta. Ante algunas hipótesis, vale recordar: el único objetivo de un prestamista es cobrar.
Una misión del organismo de crédito llegó esta semana al país. Ya se reunieron con el ministro Guzmán y Miguel Pesce, titular del Banco Central y eje de las tensiones por la política cambiaria, en medio de una alarmante escasez de divisas. Hoy se vieron con dirigentes de UIA y lo harán con la CGT.
La prioridad para la administración de Alberto Fernández es alargar los plazos de pago de la deuda que llega a más de 44.000 millones de dólares, para evitar un fuerte ajuste fiscal.