La protesta en la jornada festiva más popular del Estados Unidos, de produjo pese a unas medidas de seguridad reforzadas por el conflicto entre Israel y Hamás, y con la conmoción reciente por el vehículo que estalló el miércoles cerca de las cataratas del Niágara, suceso en el que se ha descartado al terrorismo como causa.
Hamas había anunciado que retrasaría la entrega de rehenes prevista "debido al incumplimiento" de Israel al acuerdo de tregua temporal para intercambiar a los capturados en la Franja de Gaza por presos palestinos y permitir el ingreso de ayuda humanitaria al enclave costero, lo que fue negado por el Gobierno israelí, que advirtió que retomará las hostilidades si no se libera al segundo grupo de rehenes antes de la medianoche (19 de Argentina).
El acuerdo fue anunciado por Qatar, que ofició de mediador junto a Estados Unidos y Egipto, y comenzará a regir este jueves a las 10 en Gaza (5 en Argentina).
"Más de 5.300 niños palestinos han muerto en solo 46 días, lo que representa 115 niños por día, durante semanas y semanas", declaró Catherine Russell, jefa del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef).
La ofensiva ocurrió al amanecer, en la escuela Al Fakhura que "albergaba a personas desplazadas", denunció hoy el Ministerio de Salud controlado por el movimiento islamista palestino Hamas. La mayoría de las víctimas son mujeres y niños.
El pasado 7 de octubre, el movimiento islamista palestino Hamás lanzó miles de cohetes hacia Israel en un ataque sin precedentes y realizó una incursión armada en las zonas fronterizas del sur de ese país, en la que asesinó a 1.200 personas, la mayoría civiles, y tomó 240 rehenes,
En su discurso, el jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell, enumeró las penurias que viven los gazatíes, sometidos a "una grave escasez de alimentos, agua, electricidad, combustible, de todo" y se refirió asimismo a la situación "crítica" de los hospitales, que están colapsados y atraviesan "una grave falta de medicamentos y suministros médicos".
Biden habló el martes con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, pero el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional, John Kirby, se negó a decir si el presidente estadounidense había sido advertido de la ofensiva.
La lista incluye a "padres, profesores, enfermeras, médicos y personal de apoyo", indicó el comisionado de la Unrwa, Philippe Lazzarini. "La Unrwa está de luto, los palestinos están de luto, los israelíes están de luto. Para terminar esta tragedia hace falta ya un alto el fuego humanitario", manifestó el máximo responsable de la agencia.
Un comunicado del Ministerio de Salud de Gaza anuncia el resultado de los ataques de la ocupación contra el personal y las instalaciones médicas, y afirma que el bombardeo de la ocupación israelí contra el hospital Al-Shifa y sus alrededores no ha cesado durante los últimos días.
El territorio palestino se quedó sin luz desde el sábado por falta de combustible, debido al bloqueo que impone Israel sobre el enclave. A raíz de ello, unas 29 personas hospitalizadas en la unidad para pacientes graves murieron, como así también varios bebes prematuros.
En un discurso televisado, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, volvió a rechazar crecientes llamados de la comunidad internacional a un alto el fuego a menos que incluya la liberación de los casi 240 rehenes tomados por el movimiento islamista palestino en sus ataques el mes pasado.