El ministro de Relaciones Exteriores del país oriental, Wang Yi, aseguró que su país “no alberga ningún interés propio respecto a este tema”. Pidió apoyo de la comunidad internacional.
Los ataques que coincidieron con el desplazamiento forzado de decenas de miles de civiles palestinos, también dejaron unos 200 heridos mientras que otras 30 personas todavía están debajo de los escombros.
Durante una reunión de la que participaron representantes israelíes, palestinos y estadounidenses, a parte israelí propuso que seis empleados palestinos participaran en la gestión del paso fronterizo, pero sin incluir uniformados, policías ni izar la bandera palestina.
Las embestidas se dirigieron hacia campamentos de refugiados, rondas de civiles y una escuela dependiente de las Naciones Unidas.
Varias personas heridas, incluida una joven en estado de gravedad, fueron trasladadas de urgencia al Hospital Al-Awda, en el campamento de refugiados de Nuseirat, como resultado de la arremetida de fuego.
Según la estatal Kan TV, afirmó que Ronen Bar también discutirá con funcionarios egipcios los medios para prevenir el contrabando de armas por parte de Hamas desde Egipto a Gaza. Más tarde viajará a Qatar.
El lamentable hecho tuvo lugar el sábado y se dio contra una institución que alberga a refugiados palestinos desplazados en Al-Nuseirat.
El médico de nombre Mohammed Abu Selmia afirmó que “los presos están soportando condiciones muy difíciles, incluida la falta de alimentos y agua y la humillación física".
Los firmantes del comunicado en el que lo anunciaron afirmaron que la arremetida armada se llevó adelante “en solidaridad con el pueblo de Gaza”. Israel no respondió a la presunta agresión.
Las fuentes médicas confirmaron que también hubo 40 heridos debido a los bombardeos de las fuerzas de artillería y de los aviones de combate. El número de palestinos muertos asciende a 37.765, en su mayoría niños y mujeres.
Las elecciones coinciden con una escalada de la tensión regional debida a la guerra entre Israel y los aliados de Irán - Hamas en Gaza y Hezbollah en Líbano- así como con el aumento de la presión occidental sobre Irán por el rápido avance de su programa nuclear.
Escuelas de refugiados dependientes de una agencia de la ONU, como así también campamentos de refugiados y otros lugares, como los pertenecientes a un organismo de socorro, también de la ONU, fueron los blancos de los disparos de la Fuerza Aérea israelí.