El primer ministro ucraniano, Denys Chmygal, prometió que su país "hará pagar a Rusia el sufrimiento y el dolor que ha causado". Kiev está pidiendo urgentemente a sus aliados occidentales más medios de defensa antiaérea para hacer frente a las tropas de Moscú.
Con más de 25.000 palestinos muertos y aproximadamente 63.000 heridos en tan solo 107 días, la población se enfrenta a una situación crítica y desgarradora.
La operación, denominada "Steadfast Defender" movilizará más de 40.000 militares aliados, y realizarán entrenamientos conjuntos en Alemania, Polonia, Estonia, Letonia y Lituania durante el simulacro.
Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) confirmaron que el Ejército mató a dos "terroristas" que "estaban cargando armas en un camión", anunciaron la destrucción de dos almacenes de armas y refirieron que atacaron "edificios militares" de Hamas.
En las primeras horas de este sábado Rusia lanzó sobre Ucrania 37 misiles –de los cuales fueron derribados ocho– y tres drones. Días atrás, el portavoz de la Fuerza Aérea ucraniana había advertido que el país sufría un déficit de armas de defensa aérea, lo que podría explicar los pocos objetivos derribados en esta última agresión.
Rishi Sunak anunció este viernes la contribución de 2.500 millones de libras (3.188.70 millones dólares) el próximo año, en el marco de su viaje a la capital ucraniana para firmar un nuevo acuerdo de seguridad a largo plazo.
La medida está destinada a crear empleos, reducir las facturas y fortalecer la seguridad energética nacional luego del sacudón que provocó la guerra en Ucrania, que hizo subir los precios de la energía con el consecuente perjuicio para los hogares británicos y del resto de Europa.
Si bien descartó que no iniciará una guerra “unilateralmente”, el líder de Corea del Norte dijo que si el país limítrofe intenta utilizar armas que amenacen su soberanía, no dudarán en aniquilarlos usando todos los medios, inclusive la fuerza de sus propias manos.
El secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, le expresó la inquietud al primer ministro israelí en la cuarta visita que el funcionario norteamericano hace desde el ataque de Hamas a Israel el 7 de octubre que generó la desmedida represalia sobre los palestinos.
El movimiento chiita libanés atacó con “varios drones” las instalaciones del Ejército israelí en respuesta a la muerte del alto jefe de Hamas, Saleh Al Aruri, el 2 de enero y de Wisan Tawil de Hezbollah, ultimado el lunes en otro ataque.
Los objetivos de la arremetida rusa y la magnitud de las agresiones no estaban claros de inmediato. Moscú no hizo comentarios al respecto. Hubo varias personas heridas.
Según el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional estadounidense, John Kirby, la información recopilada indica que el país asiático proporcionó recientemente sistemas de lanzamiento y varios misiles balísticos al Kremlin.