El presidente de Estados Unidos también afirmó que “Putin está simplemente tratando de borrar la idea misma de poder ser ucraniano”, mientras que su par de Francia dijo estar abocado a construir la paz y que “las escaladas verbales” no sirven a esta causa.
El presidente del país centroamericano le contestó al portavoz del Departamento de Estado de Estados Unidos, quien había publicado en Twitter que Washington “continúa apoyando a El Salvador en sus esfuerzos por reducir la proliferación de pandillas".
Durante sus cinco años en el poder, el mandatario hizo frente a un importante malestar social, reflejado en la crisis de los chalecos amarillos, la huelga de transporte más larga de la historia francesa y numerosas protestas contra diferentes reformas -previsional, de salud o de la justicia- y medidas de su Gobierno.
El cuerpo aprobó la medida con 93 votos a favor, incluido el de la Argentina, 24 en contra y 58 abstenciones. En 16 años que existe el Consejo de Derechos Humanos, esta fue la segunda sanción después de la que se le realizó a Libia en 2011.
El presidente estadounidense autorizó que durante durante los próximos seis meses, se liberarán un millón de barriles por día, lo que implica un total de 180 millones de barriles.
Tras este pedido, el Kremlin difundió documentos que vinculan a Hunter Biden -hijo del presidente estadounidense- con el financiamiento de un programa biológico militar y con la venta de agentes patógenos a Ucrania.
Después de que el presidente de Estados Unidos expresara que su par ruso es un “carnicero dictador”, las voces del ex premier Enrico Letta, del ex ministro de Desarrollo Económico, Carlo Calenda y el director de una publicación católica, entre otros, dejaron sus consideraciones.
El vocero del Gobierno ruso, Dmitri Peskov, expuso que están siguiendo “atentamente las declaraciones del presidente estadounidense”, quien había asegurado que su par de Rusia “no puede permanecer en el poder”, entre otros conceptos.
El mandatario norteamericano realizó una alocución ante unas mil personas en Varsovia, Polonia, como corolario de su gira europea para pactar con los aliados del continente una respuesta más rotunda al desafío del líder ruso cuando se cumple un mes de guerra en Ucrania.
También están involucrados la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional, la Fundación George Soros y el Centro para el Control y Prevención de Enfermedades norteamericano.
El presidente de Estados Unidos advirtió al momento de salir que un ataque ruso con armas químicas en Ucrania es una “amenaza real”. Entre los objetivos está la asistencia militar, la sanción de nuevas sanciones económicas y que sea menor la dependencia energética de Rusia.
Durante su visita al Parlamento, les dijo a los diputados que hay que evitar un “choque de civilizaciones” entre Occidente y Moscú. Aseguró que su país “trabaja con determinación para el cese de las hostilidades”.