A través de un comunicado, los presidentes de Bolivia (Luis Arce), México (Andrés Manuel López Obrador) y Colombia (Gustavo Petro), expresaron su solidaridad con la vicepresidente de Argentina ante “un nuevo ataque político-jurídico”.
El presidente de Bolivia, Luis Arce, juzgó "innegable el avance de los gobiernos de izquierda" en la región, a partir del triunfo en Colombia de Gustavo Petro, hecho que atribuyó al fracaso de la derecha en sus gestiones y advirtió que la chance de un golpe de Estado en su país "está ahí" porque "a la derecha nacional e internacional no le gustó" lo que hizo su Gobierno al "recuperar la democracia".
Las autoridades paraguayas explicaron que, si bien Argentina y Uruguay ya aprobaron los protocolos de adhesión, aun resta que Brasil defina su apoyo a la medida.
Con procedimientos similares fueron destituidos los exmandatarios Pedro Pablo Kuczynski, en 2018, y Martín Vizcarra, en 2020.
Desde el Ministerio de Relaciones Exteriores de su país informaron que su deceso obedeció a cuestiones de salud mientras que el presidente Luis Arce lamentó la noticia de su fallecimiento, a quien describió como “compañero de lucha y amigo del PS-1”.
El fallido ayuda a poner en contexto los muchos viajes no registrados del avión presidencial boliviano a Brasilia. ¿Armas? ¿Funcionarios que escapaban? ¿Derechistas que se encontraban?
El presidente boliviano recorrió un centro biotecnológico que desarrolla y produce medicamentos y vacunas en La Habana. Recibió una amplia explicación sobre las 32 empresas y 21 entidades científico-tecnológicas que integran el grupo estatal BioCubaFarma.
Este martes arribó a la localidad de Panduro y desde las 5 de este miércoles prosigue hasta la próxima localidad, Lahuachaca. El secretario ejecutivo de la Central Obrera Boliviana dijo sobre los manifestantes que a pesar de que pueden “tener diferencias”, nunca deberán pelearse entre ellos.
La movilización se extenderá por 188 kilómetros desde la ciudad de Caracollo hasta La Paz. El objetivo es manifestar el “respaldo” a la gestión presidencial y en “defensa de la soberanía, la democracia y la justicia”.
A pesar de ver saldado su reclamo, la oposición ya anunció una nueva marcha con la intención de forzar más derogaciones de leyes aprobadas este año. El oficialismo dijo que las movilizaciones estaban integradas por “grupos parapoliciales y paramilitares”.
Luis Arce explicó que el sentido de la medida es “allanar el camino para que no exista el menor pretexto” para seguir enlutando, maltratando y paralizando” la economía del país. Desde la oposición temían que podría haber sido utilizada como herramienta de persecución política.
La Confederación Nacional de Trabajadores Gremiales convocó a la medida de fuerza en rechazo a la Ley de Estrategia Nacional de Lucha Contra la Legitimación de Ganancias ilícitas y Financiamiento. Alegan querer “vivir en democracia y libertad”.