Dada la situación "alarmante", se han cerrado las escuelas primarias en la capital de la India.
El viaje del mandatario estadounidense a este país fronterizo con China tuvo como objetivo profundizar la cooperación bilateral entre ambos países frente a las crecientes ambiciones del gigante asiático en la región.
Para visitar la capital Hanoi, el presidente norteamericano tuvo que retirarse antes de que terminara la cumbre en India, cuyos dirigentes acordaron una declaración conjunta que eludió las divisiones en torno la guerra de Ucrania y la lucha contra el cambio climático.
Con precipitaciones de más de 150 milímetros y deslizamientos de tierras provocados por el viento “monzón”, el país asiático atraviesa una delicada situación, ya que se espera que las lluvias torrenciales continúen este lunes en la capital, Nueva Delhi.
El secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, y el canciller de Rusia, Serguei Lavrov, conversaron durante 10 minutos en el marco de la reunión de cancilleres del G20. Tras la finalización, quedó expuesta la voluntad irreductible de ambos países.
El país de 1.300 millones de habitantes, uno de los mayores productores de vacunas del mundo, reportó hoy un récord de 273.810 contagios en las 24 horas previas, el quinto día consecutivo con más de 200.000 casos.
Los ejércitos de ambos países realizan los movimientos tácticos después de que se desarrollara “la novena ronda de conversaciones a nivel de comandantes”, informó el Ministerio de Defensa del gigante asiático.
Los datos difundidos por el Ministerio de Sanidad precisan que India tiene ya 332.424 infectados, 11.502 más que el domingo, lo que mantiene al país como el cuarto con más infectados a nivel global.
El siniestro podría haberse desatado a raíz de un cortocircuito. Muchos de los heridos y víctimas fatales eran trabajadores que se encontraban durmiendo en el interior del edificio.
La medida generó temores a un nuevo conflicto armado entre ambos rivales, que tienen armas nucleares, pero el canciller de Pakistán descartó por ahora una respuesta militar.
Desde hace varias décadas, grupos separatistas luchan contra el ejército indio para exigir la independencia de este territorio himalayo o su integración a Pakistán.
El movimiento telúrico tuvo una magnitud de 7,5 grados y afectó en mayor medida a zonas de Pakistán y Afganistán. Si bien su duración fue de menos de un minuto, fue suficiente para generar pánico en toda la población.