La empresa acumula deudas por más de 1.350 millones de dólares.
El caso de Coca Cola-Femsa (luego retraído) puso en el centro de la agenda mediática una realidad acuciante que viven muchas firmas y se ha recrudecido desde el estallido de la crisis en 2018. En Santa Fe, alrededor de 20.000 empleos peligran bajo esta figura jurídico-financiera.
La firma tiene una deuda impositiva superior a los 60 millones de pesos en la Administración Federal de Impuestos (Afip), organismo con el cual tiene además 120 procesos judiciales abiertos. No reciben respuesta de los dueños, la Justicia nombró interventor y quiere disolver la sociedad.
Debido a problemas económicos y de baja productividad, la fábrica de neumáticos bajó la persiana. Más de 20 obreros ya aceptaron el retiro voluntario y el resto lo haría de manera indefectible.
La cuarta mayor aerolínea de Brasil acumula una deuda de 493,8 millones de reales (126,6 millones de dólares) con varios proveedores.
Importantes firmas como Tidewater Inc. intentan cerrar sus balances en medio de una situación apremiante.
Tiene 3 plantas de producción y emplea a 1.000 personas, que corren el riesgo de perder su trabajo.
Se trata de Vanity Fair que lo afirmó con un título lapidario: “Cómo los Macri cayeron en desgracia”. “Argentina no mejora y el Gobierno baja en las encuestas de previsión de voto”, sentencia la publicación.
La industria trabajó con Pepsi Cola y con el tiempo elaboró su propia línea de gaseosas llamada Interlagos.
Se presentaron 132 concursos y 829 quiebras en el Fuero Comercial entre enero y junio de este año.
Se trata de Trafigura, YPF, Lukoil, Vitol y la Coopertativa de trabajo que morigera el gremio Supeh. Hasta este próximo lunes será el tiempo de la presentación de las firmas ante el juzgado que esta llevando adelante el proceso de quiebra.
La firma holandesa era el único interesado en hacerse cargo de OIL Combustibles pero no pudo afrontar el plan de pago que le ofrece Afip -un pago de dos mil millones más la deuda concursal-.