Después de haber asegurado que el Reino Unido está en recesión, Jeremy Hunt aumentará el impuesto a las ganancias excepcionales de las empresas de energía y recortará gastos. El organismo de control fiscal calculó que la economía se contraerá 1,4 % el próximo año.
El plan económico, anunciado en el Parlamento por el ministro de Finanzas, Jeremy Hunt, reemplazará al presentado dos meses atrás por el anterior Gobierno, también conservador, que generó serias turbulencias en los mercados y un fuerte desplome de la libra.
Kristalina Georgieva y David Malpass, titulares de cada organismo, respectivamente, dieron declaraciones en una charla que marcó el comienzo de las Reuniones Anuales de 2022 del FMI en Washington.
Así lo expresaron diversos economistas, quienes atribuyeron esta situación a la pérdida del poder adquisitivo y la alta inflación derivadas del incremento del precio de la energía.
El reconocido economista Nouriel Roubini dijo que “las expectativas de inflación continuarán desequilibradas” y que le “suena delirante aquellos que esperan un cambio de rumbo y que la FED comience a recortar las tasas el próximo año”.
La Oficina Nacional de Estadísticas también muestra que el PBI cayó un 0,6 % en junio, después de haber experimentado una suba del 0,4 por ciento en mayo. El Banco de Inglaterra advirtió que la economía de Reino Unido entrará en recesión a partir del cuarto trimestre de este año.
El bloque del Frente de Izquierda de los Trabajadores, explicó por qué se abstuvo de votar y cargó contra la designación del tigrense en la cartera de Economía. Consideran que las medidas que anunciará beneficiará a los sectores concentrados.
El líder libertario criticó con dureza los discursos de los legisladores en el recinto cuando asumió Cecilia Moreau y además vaticinó que al equipo gobernante le falta "reputación para promover las medidas económicas que se necesitan".
Así lo consideró el presidente ejecutivo del Deutsche Bank, Christian Sewing, en caso de que se produzca un corte en el suministro de gas por parte de Rusia. De todos modos, se llamó a la población a no entrar en pánico.
La economía se está desacelerando, que es precisamente lo que la Fed quiere que suceda para que los precios puedan volver a la normalidad. “Muchos expertos políticos podrían decir que sí lo estamos”.
La caída de la actividad de 0,9% que se produjo entre los meses de abril y junio se suma a la de 1,6% de los primeros tres meses del año. El presidente del país del norte, Joe Biden, dijo que Estados Unidos no va a entrar en recesión.
El barril de la variedad WTI bajó 1% para cerrar en 98,70 dólares; mientras que el tipo Brent cayó 2% al negociarse en 100,70 dólares, según cifras suministradas por el New York Mercantil Exchange (NYMEX).