"También está la reforma previsional. ¿Cómo vamos a firmar eso?", remarcó el diputado nacional de Red x Argentina.
Gabriel Martino es el banquero preferido del presidente y su amigo personal. Le pidió la reforma laboral y una baja de impuestos para salir de la crisis.
El abogado laboralista estuvo en Derecho para una charla sobre precarización en el mundo de las “apps” y, consultado por Conclusión, se refirió a la chance de que el Gobierno apruebe cambios en la legislación laboral por vía parlamentaria. Sobre la unidad del peronismo, dijo: “Vamos a tener que comer algunos sapitos”.
La frase fue pronunciada en un evento de la Fundación Libertad por el abogado laboralista Julián de Diego, quien asesora a grandes empresas e hizo lo propio con el actual gobierno nacional en los inicios de la gestión, cuando se analizaba el avance de una reforma laboral.
Luego de que circularan versiones respecto a la intención del Gobierno nacional de impulsar el cambio de normativa laboral, con la indemnización por despido como principal objetivo a rebajar, desde la Asociación de Abogados Laboralistas de Rosario argumentaron su oposición a la iniciativa.
El Gobierno nacional empezó a apurar la reforma laboral por etapas y evalúa hacerlo por decreto.
El gobierno nacional creó el “consejo de notables” que asesorará a Sica para modificar la legislación laboral. Julio Simón, histórico hombre de Luis Barrionuevo, lo presidirá.
La decisión fue tomada desde la cartera de Producción y Trabajo que encabeza Dante Sica. El presidente designado es Julio César Simon, fundador del estudio jurídico que patrocina a gremios como el de Gastronómicos y de Porteros de Edificios.
El martes pasado el sector textil dijo “no” a los planes del gobierno de flexibilizar el Convenio Colectivo de Trabajo y hoy la industria se suma a la negativa. Antonio Caló consideró que sólo busca “derogar beneficios convencionales”.
En cuanto a esto, uno de los líderes de la CGT aseguró que habrá paro general si el Gobierno impulsa cambios en la legislación laboral.
El secretario general de la CTA de los Trabajadores consideró también que "el Gobierno no puede avanzar con la reforma laboral si el movimiento sindical está organizado".
El ministro se refirió también al vínculo del Gobierno con la CGT y al reclamo de la central obrera para que se decrete un nuevo aumento del salario mínimo para que se asemeje al costo de la canasta básica. Para la CGT, la cifra no debe ser inferior a $25.000.