El proyecto declara "prioritaria" para el país la "restauración de la sostenibilidad de la deuda pública emitida bajo ley extranjera" y autoriza al Ministerio de Economía a aprobar la "prórroga de jurisdicción a favor de tribunales extranjeros" y a "renunciar a oponer la defensa de inmunidad soberana".
El presidente Alberto Fernández se reunió este martes con su par español, Pedro Sánchez, y con el rey Felipe VI, donde fue respaldado en sus planes para renegociar la deuda con el FMI.
Horas después de su entrevista con el papa Francisco en el Vaticano, el jefe de Estado mantuvo una reunión con el primer ministro y el presidente italiano. Seguirán sus pares de Francia, España y Alemania. Se sumó el ministro de Economía, Martín Guzmán, a la comitiva.
Serán reuniones cerradas entre lunes y martes en las cuales las partes podrán acercar posiciones y el ministro de Economía podrá explicar las últimas medidas aplicadas en el país.
El objetivo del Gobierno de Fernández es conseguir un plazo de gracia de al menos dos años para poder comenzar a pagar la deuda de 44.000 millones de dólares que contrajo la gestión Macri entre junio de 2018 y el mismo mes de 2019.
A medida que se acerca el momento de la renegociación de la deuda comienzan a surgir diferentes versiones acerca de qué es lo que los acreedores van a demandarle al país que haga.
Según un informe titulado "La compleja situación de deuda del Estado argentino" elaborado por una consultora, la Argentina enfrenta un ratio Deuda-PBI del 80%, y deberá hacer frente en 2020 a pagos de capital por US$ 48.868 millones y otros US$ 14.838 millones en concepto de intereses.
"En términos de bienestar social los resultados no fueron los esperados como en inflación, pobreza y actividad en general y recesión en tres de los cuatro años de gobierno", expresó el ministro.
El objetivo, acorde a lo que se preocuparon en dejar trascender, es llegar a un acuerdo lo más "amigable" que se pueda, buscando que la quita de capital e intereses que se negocie en los futuros bonos que se entreguen sea lo más chica posible y se concrete pronto. El antecedente "buitre".