Acuerdo con el FMI, intento de homicidio y condena a la vicepresidenta, pujas ente el Congreso y la Corte por el Consejo de la Magistratura, pago de deuda por coparticipación a Santa Fe, alta inflación y congelamiento de precios son algunas de las postales que dejó el 2022 en materia política y económica.
Una baja en la cosecha de estos granos tendría impacto en la economía interna: la falta de oferta podría disparar los precios, al tiempo que se limitarían las exportaciones y, con ellas, la entrada de dólares. Además, esta producción es utilizada para alimentar animales, con lo que también corre riesgo el precio de la carne.
En su último informe, la Bolsa de Comercio de Rosario aplicó un nuevo recorte en la estimación de producción del cereal de 300.000 toneladas.
La ausencia de lluvias llevó a que la campaña triguera cerrara con apenas 11,5 toneladas y que la siembra de soja atraviese su peor campaña en los últimos 20 años.
El gobernador de Santa Fe se reunió este lunes con el presidente Alberto Fernández. En el encuentro, dijo que se debe mejorar la presencia policial en las calles de la provincia, al tiempo que advirtió la necesidad de asegurar el suministro de insumos para las pymes y pidió atender la estructura portuaria de la Hidrovía.
La semana transcurrió con días soleados, máximas que llegaron a los 41º en algunos sitios puntuales, y sin precipitaciones en todo el área de estudio.
El Gobierno santafesino extendió hasta el 31 de mayo de 2023 la declaración de emergencia agropecuaria por la sequía que afecta a la provincia e incluyó al único departamento que no estaba comprendido en la medida.
Para cuidar a los animales y proteger a las plantaciones de los extremos calores y de la sequía, los productores agropecuarios se verán obligados a tomar diversas medidas.
El panorama no solo afecta a los cultivos principales del país y que más divisas producen, ya que, actualmente, en provincias referentes del sector como Buenos Aires y Santa Fe, el retraso de la siembra lleva semanas y se habla de pérdidas millonarias.
En caso de concretarse, la declaración de emergencia abarcará a todas las explotaciones agropecuarias que están siendo afectadas por la falta o escasez de lluvias, a través de la prórroga de los decretos 20/2022 y 80/2022, a las que se sumarán la existentes en el departamento General López, que no estaba comprendido inicialmente.
Según destaca el relevamiento, en septiembre y lo que va de octubre "se acentuó la falta de lluvias en el centro-este del país", lo que agravó los impactos y empeoró la situación de la zona núcleo.
La sequía y las heladas provocaron la pérdida de 400.000 hectáreas sembradas con trigo, por lo cual se estima que la producción de este grano caerá un 83% en relación al año pasado. Esta situación podría elevar los precios en el mercado interno, causando subas en la harina, los fideos y el pan, por solo nombrar algunos productos de la canasta básica.