La llegada de los barcos cerealeros es de “menos del 40 %” durante este comienzo de año. Aclararon que no admitirán “ningún tipo de embestida” y que rechazan “cualquier tipo de artilugio” que pretendan hacer algunos “improvisados y/o desesperados para obtener algún tipo de poder”.
Desde el Sindicato Unidos Portuarios Argentinos destacaron que los elementos que reciben los trabajadores estibadores son de primera marca y que ello forma parte del acompañamiento que hace la organización “en momentos importantes” de la vida de los trabajadores.
Las autoridades del sindicato que agrupa a los trabajadores portuarios recorrieron las obras y expresaron su optimismo al respecto de la que “será la primera sede local en inmueble propio”.
César Aybar dijo que “no hay trabajadores ahí, son todos grupos de izquierda que están tratando de hacer ollas populares, romper”. Manifestó también que les profirieron amenazas a los empleados al decirles que “si van a entrar a trabajar no se olviden que la familia está sola”.
Este jueves a la mañana uno de los cinco empleados que no fueron reincorporados se encadenó frente a una de las portones de ingreso a la Terminal Puerto Rosario, ubicada en Cerrito y avenida Belgrano. Por la tarde los trabajadores junto con sus familias convocaron a una rueda de prensa en el lugar.
El secretario general del SUPA dijo que son muy optimistas y que pensaban que la semana pasada podrían haber puesto a trabajar el puerto. Este martes habrá una nueva audiencia en el Ministerio de Trabajo.
Los trabajadores del Supa reclamaron por la intervención del gobernador Omar Perotti para destrabar el conflicto. "No puede ser que el grupo Vicentin deje a estos compañeros tirados en la calle. No puede ser que estemos preocupados por sacarnos una foto con los campeones del mundo y no estemos preocupados por los compañeros que no tienen con qué darle de comer a sus hijos", apuntaron desde el gremio.
La Fepa tomó esta decisión luego de acompañar este viernes a los trabajadores del Supa Rosario, representados por su secretario general Cesar Aybar, en las negociaciones con la parte empresaria, que terminaron sin acuerdo después de horas de conversaciones y tras atravesar varios cuartos intermedios.
“¿Les parece que esto es un reclamo gremial? Que venga una movilización a romper las puertas, es un hecho policial”, aseguró el intendente de Rosario, luego de que trabajadores portuarios ingresaron a la Municipalidad, tras no llegar a un acuerdo con la Terminal Puerto Rosario por despidos y deudas de salarios.
La jefa de Policía de Rosario, Margarita Romero, dijo que están trabajando con el fiscal, que “son todos portuarios”, que respetan el derecho que tienen porque “están defendiendo a sus compañeros que fueron despedidos” pero que no apoyan “este tipo de situación”.
El sindicalista igualmente aclaró que mantendrán las medidas de fuerza hasta que los trabajadores despedidos sean reincorporados y se paguen todos los salarios adeudados.
Los manifestantes entraron al Palacio Vasallo tras movilizarse por avenida Belgrano en el medio de un paro por tiempo indeterminado que tiene paralizada la actividad portuaria.